Infiltrada (terminada)

capítulo 12

Narra Daniel

Miré la hora en mi móvil aun adormilado, las 11:03.

Me giré para mirar a Cris y ahí estaba, tan guapa como siempre. No pude evitar que una sonrisa tonta apareciese en mi cara, se le veía tan dulce totalmente dormida con su pelo desordenado y babeando como una niña pequeña, me gustaría ver esta imagen siempre que me levantara todos los días de mi vida. Joder, yo la quería, la quería demasiado y esto no me va a hacer ningún bien.

- Buenos días.- Su voz me sacó de mis pensamientos.

- Hola preciosa.- besé su mejilla.- Debemos levantarnos ya.

- Cinco minutos más...- Gruñó.

- Sabes que en realidad nunca son cinco minutos.

Su respuesta fue un leve puñetazo en mi abdomen.

- Vengaaaa...- No se inmutó.- Tu lo has querido.- Con un rápido movimiento me coloqué encima de ella cogiéndola para bajarla de la cama.

- ¡SUELTAME, HAS INTERRUMPIDO MI VALIOSO SUEÑO MALNACIDO!.

- Me encanta cuando te enfadas.- reí.

- NO TIENE GRACIA.- frunció el ceño.

- Ya estamos abajo ¿Qué quieres desayunar?- Pregunté.

- Haz lo que quieras.

- Oh vamos Cris...

- Odio que me levanten bruscamente y lo sabes Daniel.- Dio un golpe en la mesa.

- Lo siendo cielo, pero era tarde, luego tu eres la eficiente y yo el vago.- Saque cosas del estante para preparar el desayuno.

Preparé un par de tostadas con mantequilla y mermelada y unos zumos de naranja. No hablamos nada mientras comíamos.

- ¿Vas a estar así todo el día?- Refunfuñé.

- No lo sé.- Respondió seca.

- Joder Cris es una tontería por el amor de dios.- Dije frustrado, no quería que estuviese enfada conmigo.

- No es por eso.

- ¿Entonces?- quise saber.

- Déjalo, voy a darme una ducha.- Dejó su plato en el fregadero y subió al baño.

Odiaba que estuviéramos así y además por un motivo que desconozco.

Narra Cris

Cogí unos pantalones burdeos ajustados y un gersey negro más mi ropa interior y me metí en el baño.

Dejé que el agua caliente me relajara y callese por todo mi cuerpo. No se que me pasa, aunque enrrealidad si lo se, solo que no me quiero agobiar,  James es lo que me pasa, es demasiado misterioso y pretendo averiguar el porqué sabe mi nombre, dónde vivo y quien es Daniel, pero a parte de frustración sentía algo raro, la imagen de sus ojos mirándome no se me quitaba de la cabeza.

Lo peor de todo esto es que lo he pagado con el pobre Daniel que no tiene ninguna culpa y probablemente se este comiendo la cabeza intentando averiguar el porqué de lo extraño comportamiento. En cuanto termine de arreglarme le pediré perdón, odio que estemos así.

Cuando me disponía a aclarar mi pelo, el agua caliente dejó de salir y se transformó en agua helada dejándo escapar un grito por mi boca.

- DANIEL, EL AGUA CALIENTE NO SALE.- chillé.

- Tengo malas noticias.- Habló por detrás de la puerta del baño.- El termo está dentro y me temo que si quieres agua caliente... Tengo que entrar.

- Joder.- suspiré.- ME VOY A DAR LA VUELTA, NI SE TE OCURRA MIRAR MI LINDO TRASERO ¿ME OLLES?- chillé.

- Como para no oírte.- río.- Tranquila, sabes que no soy un pervertido.

Tenía razón. Escuché la puerta abrirse y sus pasos entrando.

- Estas mirando.- Afirmé.

- No.- respondió

- Ajam, si que lo estas haciendo.

- Cris no, me has dicho que no mire y no estoy mirando.

Miré por el rabillo del ojo y confirmé que no me miraba, solo estaba arreglando el calentador

- Quería pedirte perdón por ser tan borde esta mañana.- Solté.

- Da igual, estoy acostumbrado a ti.- Rió.

- ¿Cómo puedes tomártelo todo tan bien? Enserio, te admiro.

- Supongo que me sale solo.- Dijo.- Bueno, esto ya esta, ya me voy y que conste que no he mirado ni una vez.

No podía verle pero sabia que estaba sometiendo.

- Gracias.- Dije.

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Ya había acabado de ducharme, solo me faltaba secarme el pelo, pero Daniel se estaba duchando.

Sonó el timbre y fui a abrir.

- Hola preciosa.- Dijeron a la vez.

- Me alegro de volver a veros.- les di un beso en la mejilla a casa uno.- Pasad.

Seth y Dilan entraron detrás de mi, fue un alivio que ayer Daniel se dedicara a limpiar la casa y  a decorarla un poco mejor.

- ¿Quereis un café o algo?

- Yo solo un poco de agua.- Dijo Seth

- A mi si que me apetece ese café si no es mucha molestia.- Habló esta vez Dilan.

- Para nada.- Sonreí.

Tomamos un café, en el caso de Seth agua y un par de cigarrillos y estuvimos charlando un buen rato. Realmente me lo pasaba bien con ellos.

Escuché los pasos de Daniel bajar y al parecer ellos también, cuando Daniel entró en el salón se quedó paralizado al verlos al igual que uno de ellos lo hizo también.

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Holaaaaa! Espero que os estén gustando los capítulos nuevos.

Si os dieran a elegir entre Daniel, Seth y Dilan ¿Con cual os quedais?

Intentaré subir pronto pero estoy de exámenes y con gastroenteritis ya se verá.

Besos. Comentar, votar y comparte lo con tus amigos.

Se os quiere animalillos