16 ✞ domingo 24 de agosto, 2004

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capítulo dieciseis
" domingo 24 de agosto, 2004 "

   El lunes siguiente yo comencé mi investigación y mi madre comenzó un nuevo trabajo

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El lunes siguiente yo comencé mi investigación y mi madre comenzó un nuevo trabajo. Estaba feliz por ella porque ella estaba feliz; por fin podíamos ver un poco más de esperanza en la vida y la luz al final del túnel ya comenzaba a brillar. Por fin, todo parecía estar un poco mejor. Deseé con todas mis fuerzas que las cosas se quedaran así, al menos, por un largo tiempo.

   Le di un último vistazo a la casa antes de subirme al auto. Ahí estaba él, en la ventana del cuarto de su hermana, mirándome con una sonrisa pequeña. Le guiñé el ojo y casi pude escuchar la risa melodiosa desde la lejanía. También, estaba casi segura de que una parte de su cálido frío había venido conmigo. Me hubiese gustado llevarlo conmigo ese día (o a todas partes), porque había encontrado en Corbyn buenos chistes y momentos agradables. Corbyn hubiese hecho de mi investigación de biblioteca algo más divertido.

   Pero, además de que estaba condenado a quedarse en casa por siempre, ese era el otro problema. Aun de haber podido venir conmigo, no se lo hubiese pedido ni de loca. Porque, en realidad, iba por él y solo por él. ¿Por qué otra razón yo, Georgia Henwick, iría a la biblioteca en verano? Solo por él, solo por mi fantasma.  Así que le mentí y le dije que iría a conocer el trabajo de mi madre y que no me esperara despierto —lo cual era gracioso, porque yo ya sabía que él no necesitaba dormir—, y cómo se lo creyó no necesitaba decir nada más.

  Me gustaba mucho ir en el auto, ver por la ventana y perderme entre las palabras aburridas de mi quejumbrosa madre. Pero esa tarde particular solo podía pensar en Corbyn e intentar no ponerme muy nerviosa con toda la situación de su muerte. No podía evitar pensar que estaba involucrandome en algo mucho más grande que yo. Pero ya no había vuelta atrás, yo se lo había prometido e iba a mantener esa promesa, sin importar que tan triste y macabra la realidad fuera.

𝐠𝐡𝐨𝐬𝐭 𝐛𝐨𝐲 | 𝐜𝐨𝐫𝐛𝐲𝐧 𝐛𝐞𝐬𝐬𝐨𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora