Capítulo XIV: QUIÉN PERDIÓ LA RAZÓN

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Corrieron los tres hacia el edificio de la izquierda. Subieron al tercer piso y entraron en la habitación. Ian estaba sentado en la cama, con una manta tapándole las piernas, parecía muy cansado. Kenna estaba a su lado, le tomaba el pulso y la temperatura. Cuando comprobó que todo estaba bien, no pudo contenerse y abrazó a su hijo. Luego dijo que iría por algo de comer para él. Shannen ocupó de inmediato el asiento de su madre y le sonrió a su hermano. Sintió como Mika se sentaba al pie de la cama y Urien se colocó de pie a un costado.

-¿Cómo te sientes? -Ella le preguntó. Ian cerró los ojos y recostó la cabeza de la pared.

-Como si me hubieran estrujado el cerebro.

-¿Recuerdas algo de lo que pasó? -Urien preguntó, aun sin abrir los ojos Ian negó con la cabeza.

-Está todo muy confuso. Lo último que recuerdo es hablarte sobre Kaya y luego. -Abrió los ojos y vio hacia la pared-. Hay un gran agujero negro. -Shannen le tomó la mano.

-Tranquilo, debe ser por el shock. Ya iras recordando poco a poco.

-podríamos llamar a esa chica -intervino Mika-. La hibrida que te ayudó -dijo mirando a Shannen-. Quizás ahora que está despierto pueda ver sus recuerdos.

-No -Shannen contestó-. Es mejor que no presionemos, irás recordando poco a poco. -Ian tenía una mueca extraña mientras miraba a Mika, como si hubiera algo que no comprendiera.

-¿Por qué llamaríamos a esa chica? ¿Qué hay de Aldair? ¿Se fue? -Shannen pensó que era comprensible. Si luego de hablar con Urien no recordaba nada más, comprendía que no recordara que Aldair también estaba herido.

-Aldair fue herido junto contigo -contestó Urien-. Todavía no se ha despertado. -Ian hizo una mueca de sorpresa, seguida por una de pesar.

Kenna regresó con la comida. Ian la devoró y luego Kenna les dijo que lo dejaran descansar. Así lo hicieron. Salieron al frescor de la tarde. Sin embargo Shannen vio con molestia como Urien y Mika miraban hacia el último piso del edificio de la derecha.

-Ian no preguntó por ella. ¿Se dan cuenta? -Urien la miró.

-¿Qué quieres decir?

-Obvio, ¿no crees? La debe estar odiando de nuevo. Tibak tiene razón, algo debió pasar que nos traicionó como el sucio animalito que es. Piénsalo, el secuestro de Kaya, esos tipos que intentaron llevarte. Nunca ha estado con nosotros. Fingió traicionar a Bastiaan pero han estado trabajando juntos. -Sin embargo Urien parecía incrédulo.

-Yo la vi apuñalar a Bastiaan, estuve ahí.

-Pudo haber sido puro teatro. ¿Qué mejor forma de ganarse nuestra confianza?

-Glen nunca haría eso. -Mika tenía las mejillas rojas, como si estuviera enfadado con ella. Shannen se sintió sorprendida y triste al saber que su primo había confiado en aquella traicionera.

-Mika

-Urien también lo cree, ¿verdad? -Pero Urien ni lo afirmó ni lo negó. Miró hacia el quinto piso y sentenció.

-Tendremos que esperar a que Ian vaya recordando. Es lo único que se me ocurre.

 Es lo único que se me ocurre

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Valor de Fuego [Razas #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora