Martes 15 de febrero 2022
Kathery
El avión está a punto de despegar. Miro por la ventana con un nudo en el estómago, no sé si se deba al vuelo o a los nervios por volver a mi país, quizás los dos.
—Tranquiiiila —me dice Aarón apretando mi mano—. Disfruta el vuelo, que dentro de nada estarás con tus amigas, probablemente volviéndome loco.
A pesar de mi inquietud, suelto una risa. Siempre que hago videollamada con las chicas dice lo mismo, que lo volvemos loco. Sobre todo, cuando entre todas lo molestamos.
Reviso mi celular antes de apagarlo. Las chicas quedaron en ir a buscarnos y el grupo de WhatsApp está colapsando con mensajes.
—No —me rio, luego arrugo la nariz—. Quizás un poco, pero tú tranquilo, no dejaré que se aprovechen.
—¿Cuidarás de mí? —sonríe.
—Siempre —contesto—. Eres mi mejor amigo.
El vuelo es demasiado largo. Las primeras horas las pasamos viendo películas, y creo que fue a mitad de la tercera cuando me dormí. Al despertar, Aarón es el que está durmiendo, pero nuestras manos siguen entrelazadas.
Sé que no debería ilusionarme, es ridículo, pero cada vez que se dan momentos así con él, no puedo evitarlo. Somos amigos, me lo repito constantemente, pero una parte de mí espera encontrar el amor en alguien como él.
Paso una mano por sus ojos para ver si despierta y no lo hace, tiene el sueño realmente profundo. Así que le provecho acercándome lentamente y dejando un corto beso sobre sus labios. Nunca lo sabrá.
Suelto un suspiro, me coloco los auriculares y me centro en la música hasta que vuelvo a quedarme dormida.
Miércoles 16 de febrero, 2022
16 horas. Eso es lo que duró el vuelo. 16 horas en las que estuve sentada y si tenía culo, quedó plano. Pasamos por la aduana y entregamos nuestros pasaportes. Después de los trámites, pasamos por un enorme cartel que nos da la bienvenida a Chile y mi corazón se acelera de inmediato.
«Volví. Después de cinco años».
Retiramos nuestro equipaje tranquilamente, aunque por dentro sea un desastre emocional. Aarón no parece darse cuenta, simplemente observa todo a su alrededor. Me conecto al wifi del aeropuerto y envío un mensaje a nuestro grupo, pero no tengo respuesta. Las llamo y nada, así que empiezo a asustarme.
Trato de que Aarón no note lo preocupada y nerviosa que estoy, se supone que es mi país y debo mostrarme segura ¿no? Aunque tengo un inmenso nudo en el estómago. Nos dirigimos a la salida mientras Aarón empuja un carrito con nuestras maletas, porque sí, traje varias. Sigo tratando de llamar a mis amigas, hasta que las veo y me quedo paralizada.
Camila, Valentina e Ian.
El nudo que tenía en el estómago no es nada comparado a lo que siento al tenerlos frente a mí. La emoción es tanta que ni siquiera reacciono, me quedo quieta mirándolos con los ojos llorosos como si fuera un sueño y no quisiera hacer nada para despertar.
Los tres conversan o discuten, porque Val le da un golpe a Ian en el brazo y Camila le saca la lengua. Es ella quien se da cuenta de mi mirada y una sonrisa se extiende en su rostro con forma de corazón.
No le dice nada a nadie cuando comienza a correr hacia mí. Hago lo mismo, olvido todo y acorto la distancia encontrándome con ella en un fuerte abrazo. No quiero soltarla, ya no quiero alejarme. Fueron cinco malditos años.
ESTÁS LEYENDO
Entre Lazos [+18] [Completa]
ChickLitVal, Cami, Claudia y Katty han sido mejores amigas desde siempre. La universidad las llevó por caminos separados pero al momento del reencuentro, quieren que todo vuelva a ser como antes. ¿Podrá ser la amistad lo suficientemente fuerte? Acompaña...