Desde que su padre le había mencionado la boda había un tic tac constante en los oídos de Seokjin, y aquel lugar que visitaba dos veces al año se había hecho recurrente en los últimos días, se bajó del auto y le pidió a Hyungwon, su chofer que lo esperara en el auto. Hyungwon, no era tan mayor a él, solo le llevaba unos cuatro años más pero siempre llevaba ese semblante inquebrantable en el rostro, de echo de él había aprendido dos o tres actitudes de él.
Cuando entró a la vieja casa el aroma a viejo y al polvo lo inundaron, el omega retiró la sábana que cubría el raudo sofá y se sentó, cansado su mirada vagó por el lugar; era muy pequeño y aún más viejo que la primera vez que había estado ahí, todo estaba en el mismo piso; la cocina estaba en el otro extremo de la casa, separada solo por una pared, había una cama individual junto a la ventana con vista al bosque, la pequeña casa que su alfa había dicho que era de ellos y para ellos, sobre la cama se materializaron dos cuerpos jóvenes, desnudos y sudados, la cama donde ellos hicieron tantas veces el amor, ansiosos por casarse y que pudiera encajar sus colmillos en su cuello, llevar su marca, ser de él y que él fuera suyo; a Seokjin se le apretó el pecho, ir a ese lugar fue un cruel acto inhumano hacia su propio lobo, ese lobo que al principio rechazó por completo al alfa, también le lloró, pudo sentir como, aunque nunca fue cercano a su omega, este le imploró salir de ahí, no ver más esa cama vieja con sabanas raídas que los había envuelto pero Seokjin quería estar ahí, acurrucarse en un momento donde fue feliz, donde soñó que sería feliz. Quería llorar rodeado de todo lo que se le arrebató, solo, sucio y pobre, un omega con un lazo roto que se entregó completo. También desde ese entonces, el contacto con su lobo se perdió, ya no se comunicaban era como si hubiera dejado de existir dentro de él, aunque sabía que su lobo estaba ahí porque algunas noches lo podía escuchar gimotear en sueños. De pronto su cuello picó y gruesas lagrimas rodaron por sus mejillas, frescas y calientes.
Todas las veces se sentaba en ese sofá, era lo único que no había sido tocado por su alfa, Seokjin lo había llevado ahí en su ultima visita antes de perder a su alfa. El sofá era igual de viejo que todo en una broma hacia él, pero él nunca llegó a verlo y Seokjin no tenia el valor de tocar nada más de ese lugar, ni la cocina, ni la cama, ni el comedor; solo se sentaba ahí a mirar todo y recordar.
El ya no podía permitirse llorar, necesitaba ser fuerte porque siendo débil le habían arrebatado todo y cada vez que se permitía llorar el dolor era demasiado que creía morir y él tenía que vivir, necesitaba vivir. Una hora después de haber entrado en la casa, Hyungwon llamó a la puerta, su chofer; no le permitía estar ahí mucho tiempo.
—Vivir en el pasado no le hace bien a nadie, joven—
Había respondido cuando le preguntó por la exactitud del tiempo en que iba por él.
Al regresar a casa sin su prometido el líder lo excusa con su persistente madre que insistía en una comida de presentación "querida como quieres que no sea apresurado si son destinados ellos necesitan esa unión y no seré yo quien los obstaculice" a Jin le enfermaba aquella actuación del líder pero nada podía hacer, esos días habían sido una sobrecarga de emociones y su amado estoicismo era cada vez más difícil de sostener.
Min Yoongi en cambio decía que sería una sorpresa, quería que conocieran a aquel que por años lo había impulsado a salir adelante aunque la madre de Yoongi creía que era extraño respetó las decisiones de su hijo, pues ellos confiaban ciegamente en Yoongi. No tenían ni una sola decepción de su hijo, era ejemplar y si el menor quería casarse de esa manera tan repentina, no se iban a oponer como hacía años venían haciendo, dándole el pase libre para que su hijo hiciere lo que quisiera.
Los días se hacían menos, el tiempo y soledad se cernían sobre Jin, lo sentía tan pesado y para Yoongi solo era el alivio de complacer a sus padres pronto.
ESTÁS LEYENDO
El precio del omega
FanfictionEn el camino a derribar un clan, Kim Seokjin se encuentra con un alfa que ansia la redención. Min Yoongi, un alfa de clase alta, que tenia como único propósito llevar el imperio Min a la cima y hacerlo inalcanzable, tropieza con un omega estoico y h...