Cuando la historia se mezcla con el arte, los acontecimientos son impresionantes. Jackson Frost, un profesor de historia muy querido por sus estudiantes en el Instituto Disworks. Padre de su bella niña Adi y esposo de Mérida, una mujer a quien no amaba más. Su amor por ella se había evaporado con los años, al darse cuenta que la actitud de ambos eran cuestión de peleas todo el tiempo. Su razón de seguir con ella era su pequeña estrellita pelirroja, pero simplemente no podía un año más con aquel dolor que mal llamaba matrimonio. El arte es una expresión natural. El arte es un concepto valioso de los deseos más profundos de la amplia mente humana. El arte es amor y erotismo. Elsa Arendelle era el arte que Jackson disfrutaba con los ojos, con los labios, con el calor de su cuerpo. Era la única mujer enamoraba sus sentidos profundamente. La mujer con la que su felicidad era completa.