Los Russo se estremecen con la noticia de la desaparición de su único hijo, Axel, luego de la explosión del yate en que viajaba en alta mar. Meses después Axel Russo aparece. Se encuentra con que está divorciado, ha perdido toda su fortuna y su esposa casada con su mejor amigo. Trae consigo, no sólo las secuelas del secuestro o el misterio de lo sucedido durante su cautiverio, también el odio hacia el su mejor amigo. Alana, es soñadora y con un pasado que cree haber dejado atrás, ve su vida pasar ante sus ojos, sin problemas y conflictos. La cercanía de Axel hacia ella ocasiona un mundo de problemas y los fantasmas del pasado vuelvan. ¿Es suficiente el amor mutuo para exorcizar demonios? ¿Quiénes son los que se empeñan en destruirlo?