Confías en mi? (Part 1)

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El castaño saco la llave y abrió la puerta del departamento de su hermano. Enseguida camino rumbo hacia la cocina con las cinco ordenes que hizo en McDonald’s. Dejo las bolsas con comida sobre la mesa y fue a la sala donde vio a Niall y a Harry.

Su lindo minino estaba hecho bolita sobre el sillón y pudo reconocer una expresión de arrepentimiento en la cara del pequeño. Aun así se veía adorable. La verdad siempre se veía adorable.

- Harry! Esa lecha simplemente no esta hecha para beber en cantidades grandes – explicaba el rubio- No hiciste nada mal. Todo lo que hiciste fue realmente…asombroso pero no se puede repetir, entiendes? -

Louis no sabia de que hablaba el rubio pero las palabras “asombroso” y “no se puede repetir” llamaron su atención.  Si su pequeño chico felino había hecho algo asombroso, como decía  el rubio, sin duda Louis se enteraría y que era eso de tan asombroso que no se puede repetir? No hacia sentido. Lo asombroso esta hecho para repetirse día a día, nove? ….. El moreno estaba apunto de preguntar que era esa cosa asombrosa pero antes de siquiera abrir la boca , otra voz domino la sala.

-Louis!- exclamo el rizado al notar a su amo parado en el umbral de la puerta  y enseguida fue corriendo donde su amo. Con eso, la conversación con el rubio había terminado.

El minino salto a los brazos de su Lou enrollado sus piernas en la cintura del mayor y abrazándolo con una increíble cantidad de energía. Louis en cambio, sorprendido por el increíble saludo, no tuvo tiempo de agarrarlo bien y por instinto le agarro con las manos debajo del trasero .

-Louis, quiero Louis – dijo alegremente el pequeño.

El ojiazul zafiro estaba asombrado de que su minino haya aprendido una nueva palabra.

-Niall, compre hamburguesas y papas fritas. Están en la cocina. Puedes ir a poner la mesa por favor?-

-Claro-respondió el rubio y desapareció por la puerta, captando también la indirecta que Louis quería estar un ratito solo con Harry. Después de todo Harry era de Louis. No se olvidaría de eso en el futuro.

—Hola pequeño, estas muy  hermoso- susurro Louis en la oreja de su minino.

El rizado se ruborizo y sonrojo levemente ante tal comentario. La mente de su amo voló hacia el pasado recordando aquel día que esparció crema en el  trasero desnudo de Harry. Recordar eso y sentir ahora en sus manos el mini culo del gatito lo hizo arder de deseo. –Tengo algo para vos- susurro de nuevo el ojiazul y acto seguido camino con el gatito aun en brazos hacia el cuarto de invitados y una vez adentro,  cerro la puerta con llave.

-Meow?- pronuncio el rizado preguntando si todo estaba bien.

-Tranquilo bebe, todo esta bien- respondió su amo con  una sonrisa. Ambos se sentaron sobre la cama y de su chamarra el amo saco una pequeña bolsa y se la entrego a Harry quien miraba curioso.

-Que estas haciendo? Contrólate , es solo un niño- se decía Louis mentalmente- Harry y tanga azul , en que estaba pensando? Quítaselo Louis,  ahora! No le puedes obligar a  usar un tanga a alguien tan adorable y…..-todo sus pensamientos quedaron en un stop al ver a su minino sacar el tanga azul de la bolsa.  -Ok, solo le pondré ese pedazo tela, sinos lo habría comprado en vano, verdad?- y así había tomado su decisión final.

Por el otro lado, el de orejitas de gato no sabia que es lo que tenia en las manos. Era azul, eso le gustaba por que le recordaba a los ojos de su amo pero también era liviano y era al parecer una tela. Una tela muy chiquita así que no podía ser ropa. Con cuidado el rizado olfateo el objeto chiquito pero no pudo reconocer ningún olor que lo ayudase. Frunció el ceño y luego de un tiempo mordió en la parte donde solo había una fina línea. No, tampoco tenia sabor alguno, bueno de hecho si, sabia como tela pero eso ya era reconocible antes. ¿ Tal vez era un gorro? No, pero … si !! Debe de ser algo para el cabello,  pensó el ojiverde y enseguida trato de colocárselo en la cabeza.

-Que estas haciendo- reía su amo con notable diversión con la situación. –No es para la cabeza – explico a continuación y el minino se sonrojo. Se sentía algo avergonzado de no saber que era esa cosa. Tomo el pedazo azul y se lo entrego a su amo. –Meow- salió de sus labios como disculpa por no haber podido descifrar que era esa cosa.

- Así que quieres saber que es esto?- pregunto el amo a lo cual el menor solo asintió.

-Confías en mi Harry? Confías en tu amo, bebe? – dijo tomando el mentón del minino en su mano izquierda haciendo que las dos miradas choquen. Entonces el pequeño Harry asintió.

 -Bien- susurro el amo sin romper la conexión - Te mostrare para que se usa eso-.

Mi pequeño chico felino - Larry Stylinson ( Terminada )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora