—¿Ayn?
La inigualable voz de su hermanita retumbaba con un profundo eco en su cabeza.
—Ayn, despierta.
Un zumbido hacía vibrar cada parte de su cerebro y traía en forma de cortos y luminosos estallidos de memoria imágenes de la pequeña y su peculiar tonalidad de ojos.
—Anne...
Ayn intentó llamar a la pequeña para hacerle saber que estaba escuchándola, porque de lo contrario su hermana no dejaría de llamarla hasta que estuviera segura que tenía su completa atención.
—...sigue hablando.
—¿Ayn?
—Te estoy escuchando.
—¡Ayn!
—Anne, aquí estoy.
Todos los destellos comenzaron a volverse oscuros y opacos cuando los párpados de la pelirroja se abrieron.
Sus cejas se fruncieron y sus labios se detuvieron en su lugar cuando fue consciente de que había estado hablando en voz alta mientras soñaba.
Fue cuestión de segundos hasta que olvidara casi todo, menos los ojos de su hermana, los cuales vio materializados en la mirada preocupada de Jorgen, quien la observaba de cerca.
—Wie geht's? ("¿Que está pasando?").
—¿Qué le ocurre? -preguntó con inquietud el menor.
—¿Por qué está hablando así? -le siguió Lea.
—No tengo idea. -susurró con inquietud Martin- Hans, ayúdame aquí.
—Ayn -la llamó el chico.
La chica levantó su mirada verdosa y perdida hasta los ojos claros de su amigo, quien la acunaba entre sus brazos en los asientos traseros del vehículo.
Por un momento pareció que la chica había vuelto en si, creyeron que se había recuperado, pero descubrieron que era falso cuando volvió a hablar.
—Plötzlich wurde ich so schläfrig, dass ich eingeschlafen bin. ("De repente me sentí tan somnolienta que me quedé dormida").
Hans se obligó a mantener la compostura y a sonreír para tranquilizarla.
—Ja, du hast es getan ("Si, lo hiciste").
—Wo wir sind? Wo ist Anne? ("¿Dónde estamos? ¿Dónde está Anne?").
Hans lamió sus labios nervioso, estaba hablando con una parte de la mente desfragmentada de su amiga, mientras su ser consciente estaba perdido y débil ante los efectos de la fiebre.
—Sie spielt ("Ella está jugando").
—Wo? ("¿Dónde?").
—Draußen ("Afuera").
—Ok, alles klar ("Ok, está bien").
Y volvió a recostarse entre los brazos del chico, posicionando su cabeza en el pecho del rubio.
Hans movió su mano hasta su cabello y lo acarició un par de veces antes de cubrir su oído libre con la palma de su mano.
—¿Cuánto falta?
El volumen de voz de todos los presentes descendió hasta el mínimo.
—Según el mapa estamos cerca, pero de todas formas me apresuraré -dijo Patrick mientras aceleraba.
—¿Alguien me puede explicar que acaba de pasar? -habló Jean.
—¿Qué te dijo? -preguntó Simone.
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𝐅𝐨𝐫𝐞𝐬𝐤𝐞𝐥𝐭 [𝐑𝐚𝐬𝐦𝐮𝐬 𝐀𝐧𝐝𝐞𝐫𝐬𝐞𝐧]
AdventureNo acudan a mí con la verdad. No traigan el océano si me ven sediento, ni el cielo si pido por la luz; traigan mejor indicios, un poco de rocío, una partícula, así como los pájaros llevan del agua sólo gotas, y el viento una brizna de sal. - Trust...