Mi nombre es Alex, pero eso no importa, creo que no hay algo que me importe mucho en este momento, solo hacer que ese cerdo se aleje de mi madre.
-¡Perra estúpida!- grita el hombre alto.
-Por favor cálmate- ruega mi madre con un hilo de voz. Esta acorralada contra la pared y ese sujeto esta enfrente con una botella rota de cerveza en la mano.
Trató de pararme de nuevo pero si la botella esta rota es porque me la acaba de estrellar en la nuca, estuve inconsciente un rato, lo sé por que cuando me golpeo todavía no llegaba mi madre y la casa no estaba tan echa jirones.
-¡No puedes hacer nada bien! ¡Te dije que no me gusta que me esperes despierta! ¡Si me fuera de putas sería mi J-O-D-I-D-O problema!
-Perdón- vuelve a rogar mi madre-, yo solo...
-¡Nada! ¡Nada!- levanta la mano de la botella y amenaza con golpearla-. ¡Estúpida mujer!
Tomo un impulso y me abalanzo a el hombre, lo estrello contra la pared de al lado, haciendo que un cuadro se caiga sobre si cabeza.
Me paro rápidamente y agarro a mi madre. Esta temblando y mira a donde esta su novio, al parecer inconsciente.
-Mamá- le hablo para que volteé pero no me hace caso- ¡Mamá!
-...esta herido...- susurra sin apartar la vista de aquel hombre.
-Eso no importa- la jalo fuera de la cocina pero en cuanto salimos me da un golpe en la mejilla y regresa a la cocina-. ¿Qué demonios...-?
Me meto a la cocina a regañadientes y veo que esta arrodillada a un lado de ese carbón.
-Mi amor- comienza a sollozar-, ¿estas bien?
El hombre se remueve y por inercia me pongo tenso, observando cada movimiento que hace.
-¡Maldito mocoso idiota!- grita mirándome con impotencia el cerdo ese.
-No te muevas, vamos a el baño a ver si no te heriste- le dice mi madre.
Los dos pasan a un lado de mi y se van a el baño. No estoy enojado, solo siento pena, pena porque mi madre sea tan tonta como para seguir con ese animal, desde que mi padre nos abandono ella es así. No la culpo.
Subo las escaleras y me meto a mi cuarto, no es la primera ves que pasa esto, de echo, sería raro que no pasara pero creo que me estoy cansando. Rápidamente me limpio la sangre de la cabeza y la vendo.
Me acuesto en mi cama y me quedo dormido, sin cambiarme la ropa para ponerme la pijama, tal vez el golpe me ha noqueado un poco, de todos modos me siente mareado.
A la mañana siguiente me cambio para la escuela pero justo cuando estoy apunto de irme recuerdo que hoy es sábado.
-Muy bien, Alex- me comienzo a reñir-. Creo que estas empezando a ser más tonto de lo normal.
Ya que estoy despierto aprovecho para irme a caminar un rato. Agarro un libro y me voy a la calle, no sin antes asomarme a la recamara de mi madre, ella esta dormida junto con esa bestia vestida de persona. Es cobarde, sé que no le hará nada hasta que tenga unos diez litros de cerveza dentro, ósea como a las 9:00 p.m.
Ya fuera de la casa me voy a el parque que esta a unas calles más adelante. Cuando llego me siento y me pongo a leer un rato.
Siento como alguien se sienta a un lado pero no le tomo importancia, es normal que alguien se siente a un lado cuando es un parque público ¿no?. Después de una media hora de estar leyendo cierro el libro, no me esperaba para nada escuchar;
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¡No puedo!
FantascienzaChristian es un chico con un pasado que lo tortura día a día, en especial el día en que adquirió unos poderes, de manera no deseada, que lo torturan todo el tiempo y que deberá aprender a controlar o ver como va perdiendo el control sobre ellos hast...