Capítulo 12 (parte 3)

55 10 2
                                    

Sam:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Sam:

 Hace 2 horas que estamos sentados viendo el desfile, son 43 líneas lanzadas este año, la música de Jennifer López On the Floor suena de fondo haciendo lucir más el evento. Cada minuto que pasa son más increíbles los vestuarios y ni que decir de las chicas que lo hacen lucir; Dylan ha estado a mi lado todo este tiempo y me ha comentado quien es dueño de cada línea, nos han traído aperitivos, agua en botellas y sodas luego de unos minutos le digo a Dylan que iré en el baño y es solo asiente.

 Paso por un gran pasillo que dirige hacia los camerinos y más al fondo se encuentran los baños. Me duele el trasero de tanto que me he sentado, necesito caminar un momento por ese motivo antes de irme al baño doy unas vueltas por el lugar, subo unas escaleras que creo que llevan a la terraza del lugar. Me dirijo a unas grandes puertas de vidrio y la abro encontrándome con una hermosa vista de la ciudad de Milán; me acerco a unos barandales llenando mis pulmones del aire fresco.

  —Hermosa vista —escucho alguien decir a mis espaldas.

Me giro para observar de quien trata, y me encuentro con el fotógrafo de hace rato, lleva un traje, pero sin corbata ni pajarita su cámara está colgada a su cuello y me dedica una sonrisa.

 —Si es hermosa —hablo, volviendo a dirigir mi vista a la ciudad.

—Tú y el Señor Marchetti… —pausa un momento.

—Yo y el Señor Marchetti ¿qué? —indagó.

—Se lo notaba algo celoso —habla mientras se posa a mi lado.  
—No es verdad —suelto un suspiro —, necesitaba de mi ayuda eso es todo.  

Solo me dedica una sonrisa y quedamos en silencio era un silencio cómodo sin necesidad de emitir ninguna palabra, han pasado varios minutos y escucho alguien toser detrás de nosotros nos giramos para ver de quién trata.

 En estos momentos no sé cómo describir el rostro de Dylan, no me mira a mí, sino que está mirando al fotógrafo sus ojos azules se han vuelto negros por la furia que emana de ellos.  

—¿Ahora los baños se encuentran al aire libre? —dice dirigiéndome una mirada de enojo.

 —Quise tomar un poco de aire eso es todo —explico.

 —Señor Marchetti… —intenta hablar el fotógrafo, pero la mirada de Dylan lo calla.

—¿No tendría que estar usted tomando fotos del desfile? —Dylan pregunta al fotógrafo ahora.

—Ya mi trabajo ha culminado —responde.

 —Disculpa por la molestia —hablo tratando de apaciguar el momento tan incómodo.

—No hay problema, soy Jeremy Gutiérrez —dice presentándose ante Dylan.

 —Jeremy me harías el honor de pasarme las fotos por correo —hablo ignorando la presencia del hombre que me pone nerviosa.

INGENUOS. (En Pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora