INGENUOS. (En Pausa)

Extra D.D.D

Dylan:

Una semana antes de la boda.

Otra semana más que paso volando, la próxima semana es la boda y todos estamos ansiosos porque llegue el día esperado. Lea deja unos documentos en mi oficina y ya no quiero verlos meto todo en el maletín falta un cuarto para las 17 y me dispongo a apagar el ordenador y salir camino al Pent-House, Pablo me ha comentado si haría algo por la despedida de solteros pero le he dicho que no me apetecía nada.

En cambio Sam si fue con mi madre, Valentina y Rous a no se donde, más le vale que no tengan esos hombres que bailan semidesnudos alrededor de ellas, me despido de Lea quien termina por acomodar sus cosas, subo al ascensor y presiono la planta baja que me lleva al estacionamiento, quería estar con Sam pero también se merecía unos días de diversión.

El pitido del elevador me avisa que he llegado, camino al auto me concentro en el móvil en contestar algunos mensajes de Sam y mi padre, ya estoy por abrir la puerta del auto cuando...

Siento que me sujetan desde atrás, son tres hombres con pasamontañas, intento esquivar a uno.

—¡Suéltenme hijos de puta! —les grito mordiendo la mano de uno de los atacantes.

Me zafo de uno, y me dirijo rápidamente al elevador pero un cuerpo arremete contra mi llevándome en el piso, intento nuevamente correr del maleante consiguiendo pararme pero cuando pensé que ya estaba libre en nanosegundos recibo una descarga eléctrica sobre mis costillas, lo cual me paraliza sin poder moverme cayendo nuevamente al suelo, trato de hablar pero todo mi cuerpo se siente inestable sin poder moverme, el dolor intenso se me acumula en todos los músculos.

 <<Porque mierda nadie hace nada>>

—¿Qué mierda haces? —escucho que reclama unos de los hombres.

No puedo distinguir la voz.

—Me mordió —se defiende el sujeto de quien me defendí.

—Podrías a verlo hecho daño, un daño mucho peor —siguen hablando entre ellos.

—Ni siquiera lo he matado, no sé de que tanto lloras —se discuten entre ellos, mientras yo me retuerzo del dolor.

—Dejen de pelear y ayúdenme a meterlo en la camioneta —dice otro, creo que es el encargado de esto.

—¡Hijos de puta! —me quiero zafar pero me ponen unas esposas, y me vendan los ojos metiéndome en la camioneta.

—Perdóname Dylan, pero es por tu bien —habla el mismo hombre que me llevo en la camioneta, y mis ganas por saber quienes son se incrementan.

~◇~◇~◇~

Siento que el auto se mueve, y aun estoy adolorido por la descarga que me han dado, me quedo quieto queriendo escuchar algo, si de alguna manera pueda lograr distinguir quienes podrían ser. No se cuando tiempo a pasado desde que me raptaron, solo siento que el vehículo se detiene, haciéndome bajar con ellos.

Escucho el sonido del viento, en cambio aun no sé donde me llevan, cada que me mueven intento zafarme de ellos, pero es en vano. Subo por unas escaleras y puedo notar que trata de un avión al momento que empieza a preparar los motores para despegar, ¿Donde carajos me llevan?. 

No sé donde me ingresan tomando asiento en uno de los asientos del avión, no escucho más pasos e intento hacer lo posible por sacarme la venda, pero esta muy bien atado. Vuelvo a escuchar unos pasos y me quedo quieto, me hace beber algo y mala idea de aceptar, siento que mi mundo da vueltas y los ojos se me cierran en segundos.