Capítulo 14

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Primer capítulo del 2021, disfrutadlo <3

Ya era por la mañana, y yo llevaba unos minutos despierta comiéndome la cabeza. ¿En qué momento se me ocurrió meterme en la cama del pobre Mark? Hacer eso sin permiso es como... ¿Violación de intimidad? No lo sé, pero ahora estaba ahí acurrucada con él y no sabía como apartarme de él sin que lo no tara. No se me ocurrió nada mejor que ver esa dichosa película de miedo, esto es el karma señores.

- ¿Iris?

Mierda

-Buenos días... -Mascullé intentando sonreír.

-Ah, hola. -Me giré y tenía las mejillas sonrojadas.

Seguía abrazándome, pero aflojó un poco el abrazó y empezó a incorporarse.

-Lo siento, es que anoche empecé a imaginar cosas raras por la película y no pensé...

-Espera, espera, ¿tenías miedo?

No dije nada y él levantó las cejas.

-Señoras y señores, acabamos de exhibir a Iris, ¡tenía miedo!

- ¡Olvídalo! Tú ayer casi temblabas mientras veíamos la peli. -Exclamé resentida.

-Iris, si tenías miedo solo tenías que decírmelo. -Me tranquilizó.

-Sí, claro, no sé que hubieras pensado si te despertara solo para decirte, Mark, tengo miedo, ¿me abrazas? -Dije mientras volvía a tumbarme, derrotada.

-Mira qué fácil es.

Él también se tumbó a mi lado y me despeinó con una mano antes de abrazarme. Él no lo sabía, pero cada vez que hacía algo así se me disparaba el corazón, ¿por qué tenía que gustarme? ¿Qué pensaría él si supiese el efecto que crea en mí?

- ¡Buenos di...! -Axel abrió bruscamente la puerta de mi habitación. -As... Perdón.

Volvió a cerrar con rapidez la puerta y se fue por donde había venido.

- ¿Tienes hambre? -Rompí el silencio.

-Sí.

Nos levantamos rápidamente y bajamos al comedor. Axel estaba sacando algo de comida de la despensa y yo le pregunté a Mark que quería. Comencé a hacer dos vasos de leche y los coloqué sobre la encimera. Agarré un paquete de cereales y otro de galletas y lo puse junto a las tazas de leche.

- ¿Galletas o cereales? -Pregunté.

- ¿Las dos? Es broma, cereales.

-Yo galletas.

Nos unimos a Axel en la isla de cocina y comimos todos juntos.

-Entonces... Habéis dormido juntos.

-No. -Me adelanté a decir.

-Yo os he visto bastante juntitos.

-Eran achuchitos matutinos de mejores amigos. -Aseguré.

Mark levantó la vista hacia mí ante las dos palabras que dije, le sonreí y él me devolvió la sonrisa.

-Aja, y por eso cuando he ido más temprano para ver si estabais despiertos y estabais los dos roncando con la boca abierta, estabais tan pegaditos y abrazados.

Mark enrojeció de momento.

- ¡No roncamos! Además, ¿por qué entras sin permiso a mi cuarto?

-Vaya Iris, tú solita acabas de delatarte. No he entrado a tu cuarto esta mañana antes de que os despertaseis.

Abrí la boca en una ''o'' y fruncí el ceño.

Hasta que te encontréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora