"Love Shot" [Verkwan]

XXIV

"Asumir es la razón de toda decepción"

El reloj marcaba las cuatro en punto, habían transcurrido varias horas desde que Hansol comenzó con la grabación de sus escenas individuales. El director Kim parecía estar satisfecho con su trabajo y por el momento únicamente habían necesitado repetir un par de tomas. Aún así, Seungkwan había notado que las indicaciones del director eran cada vez más imprecisas e improvisadas, algo no le cuadraba. Se suponía que Hansol aparecería como un personaje secundario en el videoclip, no entendía por qué estaban dedicándole tanto tiempo. Por si fuera poco, no habían tenido ni un solo descanso desde esa misma mañana y Hansol se notaba cada vez más y más exhausto. Aún así, parecía haber recuperado la concentración y su rendimiento había aumentado considerablemente, lo estaba dando todo y eso solo le preocupaba más, temía que el menor pudiera desfallecer de un momento a otro a causa del cansancio. 

Desde que Hansol entró al set, le invadió una mala sensación, no sabía cómo describirla ni tampoco explicar el por qué, pero, lo que sí sabía, era que no auguraba nada bueno. Estaba claro que algo había pasado entre él y el director Kim cuando se ausentó para responder a la llamada de Jihoon y, fuera lo que fuera, estaba influyendo negativamente en el comportamiento del director Kim, como si ambos tratasen de saldar cuentas en un asunto que desconocía. No sabía mucho sobre el modo de trabajo del director Kim, pero dudaba que la explotación a la que el castaño estaba siendo sometido entrase dentro de su política laboral. 

Hansol había aceptado la exigencia de su primo como un desafío, y parecía no tener la intención de flaquear por tan solo un segundo si eso implicaba su derrota. A este paso, las cosas no acabarían bien. El set se había tornado un campo de batalla y ninguno de ellos estaba dispuesto a darse por vencido. Seungkwan había entendido que el punto y final lo pondría el perdedor y en esas circunstancias, Hansol estaba en una clara desventaja. Suspiró. No podía quedarse mirando mientras al otro lado, él se dejaba la piel frente a las cámaras, pero tampoco había nada que pudiese hacer...

—¿No es increíble? El señor Chwe no le ha quitado el ojo de encima durante toda la grabación–intervino una voz desconocida junto a él, irrumpiendo bruscamente en sus pensamientos. 

Seungkwan ladeó la cabeza en su dirección, encontrando un rostro nuevo a su lado. Se trataba de un joven castaño, de estatura media y complexión delgada. Su rasgo más significativo eran sus ojos, cubiertos por el cristal de sus gafas, de una pasta algo fina y endeble, pero que, supuso, serían muy caras. No había ni una sola persona allí que no manejara una considerable suma de dinero, y, a juzgar por el esmoquin que vestía, aquel joven no era la excepción. 

—¿Quién es usted?–inquirió algo desconcertado. El contrarió rió nervioso y extendió su mano hacia él. 

—Disculpe mi osadía, señor Boo, mi nombre es Jeon Wonwoo, soy el secretario del director Kim–se presentó. Seungkwan estrechó tímidamente su mano–Parece que le he pillado de imprevisto, no era mi intención incomodarle–aseguró. El peliazul negó con la cabeza. 

—N-no, no se preocupe-titubeó–Es de hecho una persona muy observadora, yo no me había dado cuenta–mintió. 

Era evidente que se había dado cuenta, él también había estado mirando a Hansol todo este tiempo, aunque ese detalle sería mejor mantenerlo en secreto si no quería levantar sospechas sobre la sexualidad del menor. Sería un obstáculo en su carrera que cualquier persona ajena a la compañía averiguase que era gay, si se corría la voz y su condición se hacía pública, su puesto en las listas de popularidad se vería gravemente afectado y eso se convertiría en un gran inconveniente para sus ingresos.

—Debía de estar muy concentrado, entonces. El señor Chwe no parece ser bueno disimulando–recalcó, provocando una escueta sonrisa en el peliazul.