Alex POV
Si alguien en éstos momentos me dijera que tengo un escritorio frente a mí, respondería que está completamente loco. Frente a mí sólo tengo un montón de papeles esparcidos por todos lados; no podía creer que hayamos llegado a esto.
-Adelante- exclamé al escuchar el toque en mi puerta.
-Vaya fiesta que estás teniendo, eh- dice en tono burlón Sebastian.
-Esto parece tortura medieval- replico de mal humor, sí, el tener tanto trabajo me ponía de malas y sobre todo me daba dolor de cabeza.- ¿Cómo pudieron dejar que el trabajo se acumulará tanto tiempo?
-Mi escritorio está igual, ya me duelen las manos de tanto firmar.
-A mí hasta los ojos, ya veo borrosas las letras pequeñas.
-Deberías parar por unos minutos, yo eso he hecho- sonríe triunfante.
-Si paro, se acumulará más el trabajo y ya quiero que esto pare.
-No se acumulará más de lo que ya hay...- tocan una vez más mi puerta y Sebastian va a abrirla.
-Señor Aldrich, le han mandado esta carpeta con más documentos para firmar- dice Alice, mi secretaria, tiene una sonrisa tensa al ver cómo tengo mi escritorio.
Volteo a ver a mi amigo y él deja de sonreír al ver la carpeta gorda que trae entre manos Alice.
-Está bien, Alice. Gracias.
Sebastian toma la carpeta y cierra la puerta. Comienza a ver en dónde colocarla sobre el escritorio pero termina dejándola en la silla.
-¿Decías?- preguntó sin voltear a verlo.
-Bueno, yo digo que aún así necesitamos un momento de relajación- continúa diciendo Sebastian.- Al menos para tomar agua o hacer del baño.
Le volteo a ver y se encoje de hombros, siento mi boca seca y sé que tiene razón. No me traje mi habitual botella de agua.
Dejo en paz la pluma y me impulso para levantarme, todo da vueltas y termino cayendo.
-¡¡¡Alex!!!- chilla con pánico mi amigo que sale corriendo a levantarme.
-Estoy bien, estoy bien- me apresuro a decir.
-¡Te acabas de caer! Dame la mano.
-Déjame derrumbarme en mi miseria- murmuro y ambos nos soltamos riendo. Le doy la mano y me ayuda a levantarme, sin embargo no me suelta de inmediato, cosa que agradezco porque mi visión continúa borrosa.
-¿Necesito llevarte de nuevo al hospital?- pregunta cauteloso, ya sin ningún rastro de risa.
-No, estoy bien, Sebastian. Sólo fue que me levanté muy a prisa y me mareé.
-Alex...
-Ya sé- le interrumpo antes de que pueda decir algo más.- Estoy tomando mis medicamentos, no me he sentido mal desde la última vez, me toca revisión la próxima semana y sé que me dirán que estoy en perfectas condiciones- por fin nos soltamos, mi vista a regresado a su normalidad.
-Eso no lo sabes.
-Lo sé por esto. Tengo a la prometida más hermosa que he podido imaginar y dentro de un mes nos casamos. Nuestro bebé crece en su vientre día con día. Tengo a mi familia y amigos cerca de mí, ¿qué más puedo pedir?
-¿Que se acabe el papeleo?- pregunta y soltamos otra risa.
-Eso sí sería fabuloso.
-Vamos a comer algo.
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Only You
Teen FictionDicen que todo lo que empieza algún día tiene que acabar, y eso es lo que pasó con Alex y Rosalie. Tras 4 años y medio de noviazgo deciden separarse, ¿por qué? Simplemente porque sus caminos tomaron rumbos diferentes, las cosas ya no eran como antes...