Rosalie POV
No podía creer que lo hubiera hecho. No era su secreto para que lo revelara así como así. Iba a matarlo.
Llevaba lo que parecía una eternidad en la sala de la casa de Alex, éste estaba caminando de un lado a otro sin decir palabra alguna, y no es como yo hablara mucho tampoco. Simplemente no sabía qué decir.
Gracias al cielo estábamos solos en la casa, tendría más nervios si los demás estuvieran aquí.
-¿Pensábas decírmelo?- pregunta Alex sin dejar de caminar, en cuanto siga así abrirá un camino hasta china.
-Sí. Hubo dos ocasiones en las que te lo iba a decir. En la cena de ayer fue una de ellas.
-¿Hace cuánto lo sabías?- ahora si voltea a verme, su mirada me provoca unos escalofríos intensos que intento evitar se hagan evidentes ante él.
-Lo supe el día que convulsionaste- sus ojos se agrandan.- Yo te iba a decir ese día pero con todo lo que pasó no creí que fuera adecuado.
-¿No era adecuado hacerme saber que seré padre?
-Bueno, digamos que ayer me diste a entender que un bebé hubiera sido un peso algo difícil de llevar por el tumor.
Alex cierra los ojos, inhala y exhala lentamente. Se queda así durante varios minutos, por lo que decido cerrar los ojos y recostarme hacia atrás en el sofá.
Poco después siento sus manos sobre mis rodillas, abro los ojos y lo encuentro de cuclillas frente a mí. Se nota nervioso.
-Perdón si te hice pensar que un bebé hubiera sido un peso difícil de sobrellevar. Quizá si sería doloroso el no poder conocer a mi bebé si el tumor hubiera sido maligno. Pero también sé que cualquier resultado que me hubieran dado, el saber que llevas a nuestro bebé en tu vientre me hubiera dado y me da las fuerzas para luchar contra cualquier cosa.
Mis ojos inmediatamente se cristalizan, imagino que por culpa de las hormonas o por todo el estrés que he vivido en los últimos días. Las manos de Alex se mueven de mis rodillas hacia mi barriga.
-Seremos papás- dice con una gran sonrisa en el rostro, una lágrima traicionera baja por su mejilla y él niega con la cabeza.- Seremos papás.
*****
-No puedo creer que seré tía- dice Nat muy entusiasmada.- Pero qué guardadito te lo tenías. Es que joder, ni siquiera se te nota la panza. ¿Cuántas semanas tendrás?
-No lo sé, Nat, para eso iremos hoy al doctor.
-¿Por qué no fueron ayer?- pregunta de manera insistente, no es la primera vez que me hace esa pregunta. La volteo a ver y tiene una cara de niña pequeña que le darán el mejor el regalo de navidad.
-Sólo había citas para hoy. Es un día de diferencia.
-¿Crees que ya te digan el sexo del bebé?- su entusiasmo me asusta.
-No, eso es hasta después de la semana 20 de embarazo, lo leí en internet.
Sí, ya había indagado demasiado en internet, por eso mis nervios estaban a full. ¿Y si era un embarazo ectópico? ¿O un embarazo molar? ¿Y si hay problemas con el líquido amniótico? ¿Y si sufro un aborto? ¿Y si me daba depresión postparto y no quiero a mi bebé?
Eran muchas las preguntas que tenía, definitivamente no debí de haberme metido a ese foro de mujeres embarazadas contando sus anécdotas. Unas eran de lo más bonitas que hasta ganas me daban de que mi bebé ya naciera.
Sin embargo, otras me espantaron demasiado, me hacían querer que me dijeran que esto era falso, que había hecho una prueba con un falso positivo o algo así.
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Only You
Teen FictionDicen que todo lo que empieza algún día tiene que acabar, y eso es lo que pasó con Alex y Rosalie. Tras 4 años y medio de noviazgo deciden separarse, ¿por qué? Simplemente porque sus caminos tomaron rumbos diferentes, las cosas ya no eran como antes...