Todo lo que he dibujado [#1] YM°

Capítulo 21

NARRA JIMIN

Esto tenía que ser una maldita broma.

¡¿Por qué, justo ahora?!

De todo las judas del destino esta a sido la peor, mi corazón estaba inevitablemente acelerado, pero no dejaría que él lo notara, que notara todo lo que aun causaba en mí; por mucho que lo evitara Yoongi seguiría haciendo el mismo impacto en mi corazón como el día en que lo conocí.

—¿Puedo pasar? —pregunto suavemente.

—¿Tengo otra opción? —dije con desdén a lo que él negó con una sonrisa victorioso. Quiero estampar mi pequeño puño en su hermosa cara. Me hice a un lado para que pase; quede totalmente paralizado cuando su aroma varonil atrapó mis fosas nasales. Joder Yoongi, me la estas poniendo difícil, imbécil de mierda.

Demonios, estoy hablando como Taehyung.

Pude ver como estaba escaneando con la mirada toda mi casa, incluyendo mis retratos infantiles de las repisas.

—Bien ¿me darás clases o te quedarás parado como idiota ahí? —solté con amargura.

—Soy tu nuevo instructor, al menos exijo respeto—bufé ¿Cómo mierda quiere respeto después de lo que me hizo? Mi celular sonó, cortando el silencio que se había puesto entre los dos, lo tomé y contesté la llamada, era mi mamá.

—Mamá...—

—¿Qué tal las clases pequeño? —oí su voz desde el otro lado de la línea—...¿podrías pasarme a tu instructor? Necesito aclarar algunas cosas—no le objeté nada y simplemente dedique una mirada rápida a Yoongi tendiéndole el celular, el muy maldito rozó nuestras manos intencionalmente haciendo que mi corazón vuelva a latir con fuerza. Es un descarado de primera.

—Si señora...—asintió a la nada —...perfecto, no se preocupe...Min Yoongi, un gusto— dijo amablemente, ya me estoy empezando a impacientar— Oh si claro, soy alumno del maestro Jeon— ¿Por qué hablan tanto? —...muy bien, se lo paso— y me tendió el celular nuevamente. Tenia una de esas sonrisas victoriosas.

—¿Aló mamá...?

—Mi vida, estuve hablando mucho con DongJae y me recomendó muchísimo a ese muchacho, así que te cuidara también hasta que lleguemos— mis ojos se abrieron y escuché una leve risa por parte de Yoongi.

—¿Qué? —fue lo único que articulé —pero mamá...siempre me quedo con Taehyung—chille.

—Después de lo sucedido ya me es difícil que se queden los dos—gruñí internamente.

—Pero claro, si dejas a tu hijo con un desconocido. Solo por que tu nuevo novio dice que es confiable— Okay no debí decir eso.

—Pero no soy un desconocido— bromeó y solo le alce mi dedo medio.

—Jimin, no voy a hablar contigo esto— dijo mi madre con un tono de enojo.

—Pero...—no me dejó terminar—¿me corto? —gruñí, y tiré el celular al sofá.

—¿Por qué te cabrea tanto? — oh no, no pregunto eso. Suspiré.

—¿Sabes por qué?... —lo mire fijamente—... porque no quiero verte—le respondí grosero, Okay ya no iba a aguantar más esto, tenía que soltarlo. Ya no iba a salir lastimado, ya no. Solo quería ir a mi cuarto y quemar uno por uno cada dibujo de su hermoso rostro, seguido de eso, también quemaría su chaqueta.

—¿No será que tienes miedo a besarme de nuevo? — sonrió con arrogancia sentándose muy cerca de mí.

—¿No será que te des cuenta que eres un ególatra de mierda? — él suspiro con fastidio.