ᴜɴ ᴍᴜɴᴅᴏ ᴅᴇ ᴄᴏʟᴏʀᴇs [Tamaki y tu]

•¿¡veo colores!?•

El hombre me ató a mi y a Azumi las manos y las piernas con cinta.

Veo como los cómplices del hombre se posicionan de manera que cubren la mayoría de salidas. El humo comienza a llenar la cafetería; La angustia, el miedo y la confusión estaban aumentando con cada segundo que pasaba y no me dejaba pensar con claridad. Intentaba encontrar la forma de que Azumi y yo salieramos en buenas condiciones, pero se sentía imposible. Mire en dirección a mi amiga y ella notó mi desesperación.

—T/n, cálmate, se que la situación es agobiante, pero si queremos salir de aquí tenemos que pensar con la cabeza fría.

Respiré hondo un par de veces e intenté pensar con calma. Después de unos minutos intentando recordar algo que pudiera ser util, se me vino a la mente que en alguna parte habia visto como liberarse de una atadura hecha con cinta, debía agitar las manos muy fuerte de arriba hacia abajo. ¿Era verdad? No sé, pero probando no perdía nada.

Puse mis manos frente a mi y comencé a agitarlas, después de un par de intentos funcionó. Azumi al ver lo que estaba haciendo me imitó y en poco tiempo los dos estábamos libres.

Debido al humo ninguno de los hombres había notado que nos habíamos liberado, pero cada vez se me estaba dificultando más respirar, y podía notar que Azumi le pasaba lo mismo. Rápidamente tomé dos pañuelos y los humedecí con algo de agua que encontré en un vaso para que nos cubriéramos la boca y nariz, facilitando un poco el respirar.

Fuimos agachados con el mayor sigilo que podíamos hasta llegar a la puerta trasera de la cafetería que se les había olvidado cubrir, todo estaba saliendo mejor de lo que esperaba. Cuando estaba abriendo la puerta para salir sentí como tiraban fuertemente del cuello de mi camisa.

—¿A donde creen que van?— Uno de los cómplices de el hombre que inicio todo esto me empujó fuertemente hacia atrás, causando que me golpeará con el borde de un muro.

Me sentía mucho mas mareada/o que antes y no me podía levantar. Se me cayó el pañuelo, ocasionando que no pudiera respirar bien. Todo cada vez se veía más y más borroso, estaba sintiendo el peor pánico y desesperación de mi vida pensando que iba a morir, cuando sentí que algo pegajoso y suave se envolvía al rededor de mi torso. No sé que era pero tenía un agarre muy fuerte.

Lo que sea que fuera esa cosa, me levantó y me saco por la puerta que antes estaba bloqueada por aquel hombre. Una vez fuera me dejó en el suelo, iba a agradecerle a la persona que me sacó de allí, pero me quedé sin palabras al comenzar a ver destellos de colores una vez dirigí mi cabeza a el chico que me había salvado.

—¿...v-veo colores?— Dije en apenas un susurro debido a lo maltratada que estaba mi garganta por el humo y el shock. El chico frente a mi se veía igual de atónito que yo. Me llenaron muchas emociones a la vez, pero antes de poder decir una palabra mas, me desmayé.