ᴜɴ ᴍᴜɴᴅᴏ ᴅᴇ ᴄᴏʟᴏʀᴇs [Tamaki y tu]

•Nejire•

Despertaste y te fuiste acostumbrandote a la luz, te sentaste sobre la cama mientras buscabas tu telefono con la vista, una vez lo encontraste lo tomaste para mirar la hora, las 10:47.a.m., era un poco tarde pero no te importaba aun tenias el día libre, fuiste a la sala para ver cómo se encontraba Tamaki. Estaba dormido como un bebé el sol hacía que su cara brillara《Mierda, es tan atractivo》

Vas a la cocina de forma muy silenciosa, para preparar el desayuno, estás de buen humor por lo cual deseas hacer panqueques con nutella, haces la mezcla y empiezas a freír la mezcla mientras canturreas un par de canciones, estabas tan centradx en los panqueques que no te diste cuenta de la presencia de Tamaki en la puerta de la cocina.

Tamaki: Cantas bonito t/n.

Te sobresaltas por el comentario de Tamaki ya que no te esperabas que estuviera ahí.

Tamaki: ¿Te incomodo t/n? No era mi intención lo siento.

T/n: ¡No!.. No te preocupes, estaba tan concentradx en los panqueques que no me di cuenta de que estás ahí, casi me matas del susto Tamaki.

Tamaki: Lo siento.

T/n: Está bien, ¿podrías por favor pasarme dos platos de la alacena de ahí? ~le apuntas con el dedo una de las alacenas de la parte superior atrás tuyo.~

Tamaki de forma rápida abre la alacena que apuntaste y saca dos platos blancos con unas pequeñas rayas negras en una esquina del plato. Tu pones 4 panqueques grandes y esponjosos en uno de los platos, se lo das a Tamaki junto con la nutella dando a entender que le eche a su gusto, él saca un cuchillo de mantequilla y aplica la nutella en medio de los panqueques, tu por tu lado te sirves 4 panqueques también y de la misma forma que hizo Tamaki le echas la nutella en la mitad de estos, solo que de forma más abundante.

Van a la mesa y comienzan a comer mientras hablan de anécdotas que tuvieron antes de conocerse. Ves a Tamaki un poco pensativo por lo cual decides preguntarle.

T/n: Tamaki, ¿qué es lo que tanto piensas?

Tamaki: Es que tengo el presentimiento de que se me… Olvida… Algo ~al terminar abrió en grande los ojos como la vez en la que llegaban tarde a la “cita” con Michelle y Mirio.~ ¡LA UA!.

Tu también abriste los ojos de forma estrepitosa, Tamaki corrió al baño, a bañarse, supones, y tú organizaste las pocas cosas que habían de Tamaki por la sala, cuando salió del baño, que no tardó ni 3 minutos, tenía el pelo mojado realmente se le veía afanado, Tamaki te ve recogiendo sus cosas y se ríe de la situación, le preguntas si quiere que lo acompañes o algo por el estilo.

Tamaki: Me agrada la idea, ¿estás segurx de que puedes acompañarme?

T/n: Obvio que puedo, por algo pregunto ~dices con un tono sarcástico.~

Sale una pequeña sonrisa en el rostro de Tamaki

Tamaki: Vale, déjame y termino de alistarme.

Cuando Tamaki terminó de alistarse salen de tu casa y piden un uber y van directo a la UA, una vez llegan a la entrada de UA te despides de él y te vas a pie por dos razones, una, se fue el uber y dos quieres caminar.

A medida que pasaba el tiempo te quedabas sin cosas para hacer, hasta que recordaste la manilla de mariposas que viste en el centro comercial con Adrian, por lo cual decides ir a ver si sigue a la venta, puesto que le quieres dar un regalo a Tamaki por haber ido contigo al funeral de tu padre. Cuando llegas al centro comercial empiezas a buscar la tienda hasta que la encuentras, entras y comienzas a buscar entre todo lo que hay en la tienda, ropa, maquillaje, cosas del hogar hasta que por fin das con el apartado de joyería, sin perder tiempo te pones a buscar, encuentras de múltiples animales, osos, jirafas, delfines, mariquitas, y por fin, las mariposas. Había de muchos colores, naranjas, amarillas, rosas, rojas, moradas, verdes entre otras, pero no eran como la que viste, cuando estabas a punto de rendirte y elegir otro color la viste una hermosa manilla plateada con mariposas de diferentes tamaños y tonalidades de azul, todas hechas en algo parecido al cristal pero más resistente y en el centro una gran mariposa azul brillante tambièn hecha del mismo material que la cadena de la manilla, era perfecta en toda la palabra, decididx la tomaste y te dirigiste al mostrador para comprarla, se la diste a la cajera la paso y la pagaste, te la entrego en una bonita caja azul a juego con la manilla y un listón azul rey, te emocionaba poder darle un regalo a Tamaki por todo, das las gracias a la señora de la caja, sales de la tienda y te dispones a ir a casa para organizarla un poco y tus horarios de paso.