Gatito - Nayeon y Tú

Capítulo 1.

Disfraz.

—No quiero que hagas ninguna estupidez— Me señaló la jefa. — ¿Entendido? — Asentí con la cabeza.

—Ya sabes que decir, si alguien pregunta la dirección, le das el papel, si alguien se quiere tomar una foto contigo, posas de forma tierna mostrando el cartel— Indicó todo, por tercera vez.

—Podré no saber coreano, pero no soy un tonto— Me coloqué la parte de arriba, disminuyendo mi visión drásticamente.

Me di la vuelta, golpeandome con la puerta principal por mi nueva forma.

Tuve que darme una vuelta pequeña para pasar de lado por la puerta.

Básicamente, comenzado de mala manera mi nuevo trabajo de medio tiempo.

Salí por las calles, simplemente caminando y atrayendo miradas, comprobando que el disfraz funcionaba.

Y sin tardar mucho, empezando la gente a pedirme fotos, cosa que aceptaba, pero sin hablar, eso era parte del personaje.

Pese a lo tonto que me veía, me estaba divirtiendo, cuando te diviertes en algún trabajo, es dinero gratis, cosa que, necesitaba por montones.

Luego de un rato, llegué a la zona del centro finalmente. Costandome avanzar sin chocar con nadie accidentalmente, o siquiera avanzar sin que esas personas a las que chocaba se quisieran tomar una foto conmigo.

Cómo era usual, había artistas, gente tocando o cantando, y sin faltar, los grupos de kpop pequeños bailando en varios puntos del centro para promocionarse.

Y como era más usual, pese a estar trabajando, me quedé allí viendo a uno de esos grupos bailando.

Recordé en dónde estaba metido, y lo que podría hacer con eso, así que lentamente me fuí acercando, hasta estar al menos, en el ojo público.

Empezando a bailar tontamente, eso sí, al ritmo de la música, sacando mis dotes más profundos de bailarín.

Luego de empezar a escuchar las risas debido a mi actuación, quitaron la música, volteando a ver a la persona encargada ocupada en su teléfono.

Luego empezó a sonar una canción diferente, más bailable, a lo que entendí que tenía que hacer.

Y así fué cómo realmente empecé a bailar con seriedad.

Al final, el líder o manager, básicamente, encargado del grupo, me dió las gracias por el show, y una vez más, la gente me invadió queriendo tomarse fotos conmigo.

Luego de casi diez minutos, podía respirar, figurativamente, bailar o moverme mucho dentro de la cosa donde estaba era difícil, más con tan poco aire.

Al menos, probablemente tendría un aumento o bono por buen trabajo.

Al final de la noche, volví con todo y traje a mi pequeño departamento compartido.

Recién abrí la puerta, pasé dándome una vuelta, y entré, escuché como ambos roomies se reían.

Me quité la parte de arriba. —Tengo que conseguir dinero de alguna parte además de la beca— Dije un tanto enojado, yendo a tomar agua, ya que ese disfraz tiene unos quince grados por encima del ambiente.

— ¿Cuánta es la paga? — Preguntó Eric una vez dejó de reírse. —Lo normal de un trabajo a medio tiempo— Respondí al terminar mi vaso. —Es de ese café con gatos, ¿no? — Preguntó ahora Nancy.

Asentí con la cabeza. Siguiente a eso, me quité el disfraz, por suerte teniendo ropa debajo, aunque estaba demasiado sudado.

Al día después, seguí con mi rutina, igual de animado como el primero, con la diferencia que aún más personas se tomaban fotos conmigo, algunas hablaban conmigo, pero sin embargo, si no era ingles, o oraciones específicas, no entendía demasiado.

Llegué a casa, agotado e igual que ayer.

—Mira, mira— Me enseñó Nancy su celular, pero no me había quitado la parte de arriba, así que alejé su mano, me lo quité, y vi como era un vídeo en Youtube.

— ¿Trescientas visitas? — Pregunté a medida que leí, pero estaba en coreano. —Trescientas solo no, trescientas mil— En ese momento abrí los ojos a mi máximo esplendor.

Como tal, no tengo aún ninguna historia con únicamente Nayeon, así que está lo será.

Me inspiré para hacer esta historia realmente por ese gato viral en YouTube de hace unos años.