Nakamoto Yuta es un policía con una misión importante, debe infiltrarse como alumno en aquella escuela para buscar pistas sobre el asesinato de una mujer, un caso que se cerró de manera misteriosa en el pasado.
No obstante, Yuta se ve involucrado en...
Ciclos dentro de ciclos. -NEO UNIVERSE, by KellyJohnXiao
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—Será mejor que dejes de jugar, Na—unos cuantos hombres de la policía hicieron acto de presencia tras atravesarlos árboles y acercarse al área del campamento.
La denominada Na YangMi casi se atraganta con su propia saliva ante la figura de aquel hombre mayor en la zona, rodeado de cuerpos poderosos con armas, apuntándole a ella y sus aliados.
No podía ser cierto...
Con razón había oído un helicóptero...
—¡Las manos donde pueda verlas! —gritó un policía apuntándole. Ella no obedeció.
—Lee SooMan...
—El mismo—alzó el mentón, bajando hasta quedar a unos cuantos metros de distancia de la mujer. Todos los policías comprados por ella se vieron obligados a soltar sus armas y patearlas lejos. Estaban rodeados no tenían otra opción que prescindir—. Me alegra mucho verte, amor mío—soltó sarcástico, acomodándose los lentes.
La ira en la fémina aumentó más con cada gesto que ese hombre hacía.
—No sabías lo destrozado que estaba al creer que mi esposa murió y me dejó solo, con el corazón roto—continuó hablando con gracia.
Antes de poder abrir la boca e interrumpir a su marido, pudo sentir como el mundo se le iba a los pies, al ver como uno de esos policías armados eran nadie más y nadie menos que Dong JungSoo, ahí mirándola con repudio.
El maldito no había muerto. Maldito fuera SiWon y su debilidad por los amigos. Pensó enfurecida.
—Un gusto conocerte en persona, Na—dijo él ahora, apuntándole con el arma.
—Creí que al menos te suicidarías cuando murieron tus hijos y tu esposa—escupió ella con odio. Y luego recordó que había quedado uno vivo. Claro... la señora Moon había cuidado a SiCheng cuando era un bebé. Por eso no murió con el resto de su familia en ese "accidente".
—Lamento decepcionarte, YangMi—suspiró con falsa lástima—. Pero no te daría ese gusto también. ¿Creías que lastimaría a tu hijo? —ella no respondió, no se movió y no dejó de mirarlo de mala forma. Siendo su silencio una respuesta afirmativa—. Ya, no te preocupes. No soy tú. Yo no le ando arruinando la vida a un montón de adolescentes por un puto capricho. El dinero y el poder no lo es todo en esta vida.
Ella maldijo en voz baja cuando alguien se le acercó por detrás a esposarla.
—En la cárcel te darán todos los lujos que quieras. Ya verás.
—Oh—ahora fue el turno de SooMan de hablar, acercándose a ella con una siniestra sonrisa—. Y si tienes dudas sobre el dinero, no te preocupes. JaeMin me lo dio a mí hace muchos años.
