Sky
Estaba lloviendo. Podía ver la lluvia caer por la pequeña ventana de la blanca habitación.
Me desperté no hace más de diez minutos. Lo primero que hice, fue entrar en pánico. No solo por el vívido recuerdo de aquel disparo qué quiso poner fin a mi vida. Sino que también, por el echo de que me encontraba en un lugar desconocido. Ni siquiera había visto a mis padres por aquí. Y eso es raro.
¿Dónde me encuentro? ¿Qué fue lo que pasó?.
La enfermera terminó por cambiar las vendas, dejando todo sobre una charola.
-Cualquier cosa que necesites me puedes avisar- dijo ella. Una mujer de mediana edad con una sonrisa amable.
Asentí. Aún aturdida por toda la situación.
Soy la mala suerte personificada....
-Estarás bajo revisión por unos días- tomó la charola entre sus manos con algunos de los productos que usó.
La miré.
-¿Mis... familiares....?- intenté averiguar. Tenía la voz ronca debido a que mi garganta se encontraba seca.
Estaba sentada sobre la cama del hospital, con mi espalda apoyada sobre el respaldar. Posición que la misma enfermera se encargó de realizar.
-Mmmm.... sólo he visto a dos de sus amigos.... y tú novio-
¿EH? ¿Novio? ¿Acaso había despertado en un universo paralelo?.
Apreté mi ceño, confusa.
-¿Novio?- repetí.
¿Timothy....?.
-Si- afirmó ella. Alegre -Es un chico tan ideal. Se quedó a tú lado todo este tiempo. Es muy romántico- informó con una gran sonrisa. Incluso sus ojos brillaban de admiración -Tienes suerte-
Levanté una ceja, perpleja. ¿Y mis padres?. Se me hacía raro que no se encuentren aquí. Después de lo que me ha pasado.
-Oh... aquí está- soltó la enfermera.
¿Quién?.
Mi atención pasó de aquella mujer a la puerta de la habitación. Está, se encontraba ya abierta y una persona había ingresado con dos bolsas en sus manos.
Estaba más confundida cuando aquellos ojos verdes se encontraron con los míos. ¿Alex?.
¿Qué... que sucede? ¿Por qué está él aquí? ¿Y Timothy?.
Su mirada me recorrió, corroborando que en verdad había despertado.
-Yo... os dejó a solas....- se escuso la enfermera. Apartandose -Si necesitan de algo. Pueden llamarme....- repitió una vez más. Antes de salir de la habitación.
Cerrando la puerta tras su paso. Dejándonos a solas.
Alex, bajó la mirada. Antes de caminar, con inseguridad, en dirección a la cama.
-Has despertado...- dijo. Depositando las dos bolsas sobre una mesa alargada qué se encontraba a un costado de mi cama.
-¿Qué está pasando?- pregunté al fin. En un hilo de voz ronca.
Alex tomó asiento en una de las sillas vacías que se encontraba a un costado de la cama del hospital. Parecía ser peligrosamente incomoda para los acompañantes de los enfermos. Deberían tener una cama incluso para ellos.
-El disparo...-
-No me refiero a eso- lo interrumpí. Apretando mis manos nerviosamente sobre mi regazo. Fijando mi atención sobre las mismas -¿Dónde están mis padres? ¿El guardaespaldas? ¿Por qué estas tú aquí?-
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ENSEÑAME A AMAR ✔️
Roman pour Adolescents¿Ella?, ella pertenece a una clase privilegiada. Tiene todo lo que necesita e incluso más. Es de carácter fuerte, decidida y siempre consigue lo que quiere. Por más que eso implique sobrepasar a los demás. ¿Él?, él lo perdió todo cuando de niño huyó...
