capitulo 8

8 0 0
                                    

Joel.

Es hoy, se llegó el dia en que me presentaré en su casa como un novio ficticio, no tendriamos por que andar pasando estas cosas si un christopher no hubiera dicho en frente de su padrino que soy su "novio", quizás no tendria que conocerlos tan pronto mientras victoria se mantuviera en el anonimato pero no.

Gracias christopher.

—quitate esa corbata, que no vamos a una cena de negocios te digo.

—perdón por esforzarme siendo un gran novio ficticio.

—si como no, parece que vas a ir a pedirle trabajo a mi abuelo—se pone los pendientes.

La veo por el espejo de cuerpo completo en el que ambos estamos arreglandonos.

—no seria mala idea, puedo ser su...

—asistente, su gato, su lame botas, su esclavo, su...

—ya mejor no digo nada—la irrumpo y me quito la corbata, no sirve de nada.

—listo entonces.

Asiento, me giro a ella viendo como se pasa las manos por el cabello oscuro tratando de acomodarselo, no disimulo nada en verla de pies a cabeza y menos en ese vestido color vino que la hace mas hermosa que de costumbre pero aun no la supero en el vestido rojo de aquel dia.

—te ves bien—aludo atonito.

—no digas estupideces.

—no, pues de nada—alzo mas manos en seña de rendición.

A veces trae unos humores que ni ella misma se ha de aguantar.

—vamonos que mi familia es muy exacta con los tiempos, no querrás morir apenas pises la acera de su casa—toma su bolso—, andando.

—¿y es necesario que nos quedemos?—tomo mi pequeña mochila improvisada con un par de cambios.

—mi abuelo te hará mil preguntas y mi abuela te defenderá de mi abuelo, lo va a regañar por atosigarte pero después ella te va a atosigar con preguntas mas ligeras que las de mi abuelo, si uno te habla de politica, la otra te habla de la religión o así, algo asi, en eso se va a ir toda la cena hasta que sea muy tarde y ya no nos dejen ir.

—¿cuantos chicos has llevado que ya te lo sabes de memoria?

—que te importa, ¿nos vamos?

Asiento y camino a abrir la puerta de mi habitación cediendole el paso, bajamos al primer piso donde los chicos permanecen jugando como siempre cuando no tienen ganas de salir de fiesta que es el caso de hoy.

—oye vica por que no... wow—quedó atontando nuestro querido niño ojiverde.

—¿que decias er?—no despega la mirada del celular.

—te iba a invitar a jugar pero veo que van a salir—la sigue viendo y no tengo nada a la mano que lanzarle.

—lo siento, será despues.

—lo mas probable es que regresemos mañana. Asi que traten de sobrevivir y nada de personas desconocidas, ni fiestas, ni nada—advierto.

—si mamá—rueda los ojos rich—, como quiera saldremos mas tarde, solo matamos tiempo.

—camina pimentel que el tiempo es oro y la que lo paga soy yo asi que no seas tortuga—ordena caminando hacia la puerta sin apartar la mirada de ese celular.

¿pues que la tiene tan metida ahí?

—ya voy amorcito—le digo entre dientes.

Sale y yo me quedo siendo el foto de burlas de los chicos.

La IndicadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora