UN PAPÁ Y 4 CRÍAS | RICHARD X CNCO

05 | Celos y discusiones

Una niña besó a mi niño, esto no podía ser cierto. Dejé a Joel jugando en la arena y salí con Erick en brazos yendo hacía donde se encontraba mi pequeño bebé con una mini goloza.

Me paré junto a ellos y los miré con un semblante serio

—Hola papi —saludó mi nene todo inocente

—Hola mi pequeño bebé —le devolví el saludo todo cariñoso—. Hola escuincla —le dije a la niña todo serio

—Penélope, él es mi papá —me presentó con la niña—. Papá, ella es Penélope, mi amiga

¿Amiga? Los amigos no se dan besos en ninguna parte del rostro. Mucho menos en la boca

—Hola escuincla ¿Y cuál es tu apodo? ¿Pene? —pregunté y la niña hizo un gesto dando entender que no comprendía.

Guajajaja chistes de adultos, escuincla.

No es por juzgarla pero tiene cara de ser bien tóxica y yo no quiero una tóxica que intoxique a mi familia. No señor, eso no lo permitiré. Es momento de ahuyentar al animal de la comida.

—Así que... ¿Amigos? —pregunté intentando no mostrarme celoso

—Sí, somos amigos señor —me contestó la escuincle

¡¿Señor?! ¡¿Señor?! ¡¿Ese espermatozoide mal hecho me había dicho Señor?! ¡Solo tengo 25, sigo siendo joven! 

—Y bueno niña ¿Qué intenciones tienes con mi hijo? —pregunté viéndola con los ojos entre cerrados. Tenía que tener una platica, tóxico con tóxica

—Papá... ¿Cómo que intenciones? ¿Qué es eso? —mi hijo me miraba sin entender, como si en otro idioma hubiera hablado 

—Quiero decir que es lo que quiere hacer contigo —le expliqué

Donde la escuincle con estatura de minion me diga que quiere desvirgar a mi hijo, tendré que tomar medidas extremas. Le diré que no existe Santa Claus y mucho menos los Reyes Magos.  

—¿Hacer con él? —preguntó la hija de su puto padre con una voz inocente. Esa niña quiere engañarme pero no lo va a lograr—. Pues muchas cosas, señor

¡¿MUCHAS COSAS?! ¿QUÉ CLASE DE COSAS QUISIERA HACER ESA HORMIGA CON MI BEBÉ?

—¿Cómo qué cosas pequeña hormiga? —pregunté en modo molesto y con una posición de reto hacia ella. Me sentía como un padre empoderado a punto de atacar.

—Quisiera jugar con él un rato, hacer la tarea juntos... leer en voz alta

 —¿Qué pendejadas son esas de leer en voz alta? —pregunté todo sacado de onda— ¿Qué crees que es el parque? ¿Un concurso de oratoria? ¿Qué clase de niño de 8 años le gusta leer en voz alta?

—A mi me gusta sacarme los mocos —comentó Zabdiel, llegando a interrumpir la platica y justo se estaba sacando uno de su nariz

—¿Leer en voz alta? ¿Qué sigue? ¿Escribir poesía a la luna? 

—Me gustan los juegos señor 

Y chingada madre ¡terca con lo de señor! ¡que no soy señor! Soy un adulto en pubertad. 

Bueno, por lo menos los juegos era algo que a todo niño le gustaba. ¿Qué son esas mamadas de leer en voz alta? Imagínate tener que leer en voz alta fanfics con sus partes +18. Hago una cosa así y soy capaz de parar en la cárcel. 

—¿Y qué clase de juegos te gustan, pequeña hormiga? ¿De carreras? ¿Balazos? ¿Just Dance?

—De matemáticas señor

—¡QUE NO SOY UN SEÑOR CHINGADA MADRE! —grité ya todo harto.

Ya estoy hasta la madre tener que escuchar que me digan señor. Soy un adulto puberto de 25 años con 4 hijos. Y no, no soy señor.

—Oiga ¿Qué le pasa? —llegó a interrumpir una mujer de unos 35 años, vestida formalmente

—Señora este es un parque, no una boda —le contesté después de ver un ramo de rosas en su mano. Parecía de esos centro de mesa que me robaba cuando iba a fiestas con Sally. Recuerdo cuando una vez me agarre a putazos con una viejita por un adorno de un baby shower. Terminó ganando la viejita 

—No tiene permitido usar ese tipo de lenguaje enfrente de mi hija —habló la vieja con una voz que se notaba que era una persona soberbia—. ¿Ellos son sus hijos? —preguntó viendo a mis nenes que se escondían detrás de mí.

—¿Quién?

—Ellos

—¿Le preguntó? 

Mis hijos se rieron aunque no entendieran del todo el "chiste". La señora me miró fijamente como si tratara de adivinar mis mayores secretos. 

—No puedo creer que exista personas con ética decepcionante. Y lo peor de todo, es una persona morena, eso explica porque su manera de hablar

Y mi sangre empezó a hervir.

—¿Qué tiene que ver que sea moreno? ¿Eso le molesta? —la mujer asintió— Me vale madre. Que triste que una persona como usted, racista, tenga la dicha de ser madre. Peor tantito, le está enseñando a su escuincla a no respetar a las personas solo  por su color de piel. Personas como usted solo sirven para robar oxígeno y traer criaturas para sobrexplotar el mundo y enseñarles a ser como ustedes. Personas racistas llenas de odio

—¿Ya terminaste? Moreno de mierda —maldijo la mujer con cara de animal atropellado.

Erick empezó a hacer sonidos extraños, como si se quejara. Ya conocía ese ruido. Era momento de estallar la bomba. Me acerqué a la señora y ella se trataba de alejar, pero entre más se alejaba, yo más me acercaba.

—Quítate, moreno asqueroso 

Y en eso Erick le lanzó un gran vomito a la mujer racista. La mujer empezó a gritar como loca. Como si mis hijos y yo nos hubieramos puesto de acuerdo, los 4 (hasta Erick, a pesar de ser un niño de 6 meses) le sacamos la lengua y todos nos fuimos corriendo de regreso a la camioneta. Entramos y nos empezamos a reír por lo que había pasado anteriormente. 

—¡Eso estuvo muy bueno! —gritó Zabdiel

—¡Sí! —exclamó Joel aplaudiendo con sus manitas pequeñas y tiernas. 

Reí y los miré por el espejo. Christopher tenía un semblante triste y serio a la vez, conocía esa cara. Me recuerda a mi a su edad cuando me enamoré de una niña y me rechazó por no ser alto.

—¿Qué pasa Chris?

—Si me gustaba esa niña...

—No te preocupes hijo. Ya vendrá alguien mejor.

Sonreí y el igual. Antes de irnos revisé mi teléfono y la notificación que había, hizo que mis ojos se abrieran a un más

Tenía una llamada pérdida de Sally.