—¿Qué me estás diciendo?
Tenía altas ganas de llorar, lo que me estaba diciendo Josh no tenía que ser cierto. Todo debía ser una mentira, en cualquier momento Sally tiene que aparecer y viva. Todo era mentira ¿verdad?
—Lo lamento Richard. No hay forma de reconocer el cuerpo, el rostro está totalmente irreconocible —informó y puso su mano en uno de mis hombros
—Chingada madre —susurré y suspiré— ¿Cómo le diré a mis hijos sobre esto?
Y Josh me dio un abrazo en señal de apoyo.
—Es que no debe ser cierto, debe de estar viva, debe de haber un error —me aferré a la idea de que ella seguía viva.
—Tranquilo Richard, es la triste realidad.
Estoy llorando, si gente estoy llorando. Lloro porque mi esposa ya no esta viva, lloro por su muerte, lloro por no saber el motivo de su ida, lloro porque mis hijos se quedaron sin su madre.
¿Cómo les explicó? ¿Cómo se los digo? Todos están chiquitos, no entenderán tan fácil. Estan en la edad en la que necesitan de sus padres juntos y aunque hubieramos estado divorciados, prefiero mil veces eso a que no vuelvan a ver a su mami.
Y lo peor de todo es en la forma en la que murió. No podemos abrir la ataúd para que mis pequeños puedan verla por última vez; al menos tendrá un lugar para llevarle flores.
—Le dije a mi tía lo que sucedía y dijo que te daría los días libres que tu quisieras —me avisó—. Necesitas estar solo con tus niños
—Gracias Josh —me limpié las lágrimas
—Lamento mucho lo que pasó, me ofrezco a ayudarte con el funeral. Aparte... te invito a un café en mi casa para que pienses en como le dirás a los niños
—De acuerdo
Asentí y recogí a mis niños. Por suerte la tía Pancha nos dejó irnos y pase a sacar a Chris y a Zab de la escuela para decirles lo que pasaba. Llegamos a la casa de Josh que en realidad era un departamento, grande y bonito como para que solo viviera 1 persona.
—Ahí está el xbox por si quieren jugar —dijo Josh y Chris y Zabdiel corrieron hacia la consola
—Está padre tu departamento, jamás había venido —comenté sentándome en la mesa
—Nunca viniste cuando te invitaba. Recuerda que le caía mal a Sally que por ser mala influencia y todo eso —explicó y luego me miró serio—. Perdón, no debí recordarte eso
—Tranquilo, no es tu culpa
Chris y Zabdiel jugaban en la consola, Joel comía galletas y las remojaba en un vaso con leche y Erick dormía tranquilamente en el sillón. Le pusimos unas sillas para que no se cayera por si se le daba moverse.
—Que tranquilos son cuando se entretienen —comentó riendo mientras me entregaba la taza llena de café
—Si... se miran como unos angelitos cuando son todo lo contrario
—Somos muy tanquilos —dijo Joel con la boca llena de galletas—
—No hables con la boca llena —lo regañé pero con una actitud tranquila, él entendió como siempre
—Oigan ¿no quieren ver fotos? —sugirió Josh
—¡Fotos! —exclamaron los 3 niños y todos se sentaron en la mesa esperando por lo mencionado.
Josh sacó una caja grande color negra. Cuando la destapó había un montón de fotos regadas dentro de ella. A cada uno nos dio un montón de fotos para verlas.
—Siempre tuve curiosidad por ver como era Josh de bebé —confesó Christopher tomando las fotos
—Yo también —agregó Zab
—Miren, aquí estabamos su papá y yo en el baño
—¿Qué estaban haciendo? —preguntó Zab
—Apoyaba a su papá mientras vomitaba.
En la foto se miraba como yo estaba vomitando en la taza del baño mientras que Josh posaba sonriente en la foto haciendo la seña de amor y paz con su mano derecha.
—En esta le llevamos serenata a una novia de Josh —les enseñé una foto en donde él y yo estabamos vestidos de mariachi—. La papá de la muchacha nos corrió y su mamá nos empezó a pegar con la chancla
—Recuerdo muy bien ese día, fue gracioso
—Si Gaby se entela, te pega —dijo Joel y Josh rio
—Es un secreto que no debe ser revelado
—Oh encontré una foto cuando Josh era bebé—avisó Chris sonriendo pero luego la borró.
Al ver su reacción, volteo a ver a Josh y el también tenía un semblante serio.
—A ver —tomé la foto y me llevé una gran sorpresa.
Era igualito a Joel.
—Josh... ¿Qué significa esto? —le mostré la imagen—. ¿Por qué te pareces a Joel?
—Richard... puedo explicarte...
—¡¿Te acostaste con mi esposa?! —exclamé molesto—. ¡Me avisaste que acaba de morir y ahora descubró que me engañó contigo!
—¿Quién murió? —preguntó Zab
—¿Mama murió? —preguntó Chris.
Estabamos en un gran problema.
ESTÁS LEYENDO
UN PAPÁ Y 4 CRÍAS | RICHARD X CNCO
CasualeRichard tiene todo lo que siempre soñó: un buen trabajo, un lindo hogar y una familia hermosa que compartía con Sally, su esposa. Todo cambia cuando de la nada, Sally desaparece y Richard tiene que hacerse cargo de sus 4 hijos. ¿Quién dijo que ser p...