Han pasado dos semanas desde que recibió el último mensaje, no le ha vuelto a decir nada, y más le vale por su bien, que no lo haga. Ésta noche he quedado para cenar con ella, quería pasar toda la tarde con ella pero ha quedado con sus amigas así que hasta la noche me toca esperar.
...
En un rato he quedado con Mai, Sam y Nia para una tarde de chicas. Quiero ver cómo va la barriguita de Mai y las locuras de Sam y Nia. ¡Qué ganas de verlas! Que desde que empecé con Hugo poco he hablado con ellas, me he centrado demasiado en él. Que no digo que no se lo merezca, pero ellas también, está claro.
...
Sam y Nia están sentadas en el bar donde habíamos quedado.
- Niñas, ¿qué tal?
Las dos se levantan y me dan dos besos; Nia me abraza.
- ¿Cómo estás cari? Que hace mil que no te vemos...
- Nunca había estado mejor, Hugo me trata de maravilla, es mi sueño hecho realidad. Por cierto, ¿Mai no venía?
- Sí, llegará un poco más tarde.
- Ah, claro, debe estar liadísima con los preparativos del niño.
Se miran entre ellas y sonríen nerviosas.
- Esto Eva... de eso queríamos hablarte...
- ¡Chicas! ¡Siento llegar tarde!
Ahora soy yo la que me levanto para abrazar a Mai y tocarle la barriguita.
- ¿Cómo está mi sobri?
- ¿Qué dices Eva? ¿Tanto me he engordado?
La miro extrañada.
- Oh vale... vaya... que cortazo... esto Eva... ahora que ya estás con Hugo pues... te dije que estaba embarazada para distraer tu atención porqué a esta casi se le escapa que lo habíamos visto...
- Pensamos que lo mejor sería que no lo vieras, pensábamos que se iba a volver a ir.
- Habías sufrido mucho y no queríamos que volvieras a pasar por lo mismo.
- Chicas...
- Lo hicimos por tu bien, no sabíamos cómo te ibas a tomar que él hubiera vuelto.
- Preferimos hacerlo así, nos salió mal porqué aún así os encontrasteis y ahora...
- ¡CHICAS! Y ahora Hugo y yo estamos juntos. Tranquilas, sé que lo hicisteis por mi bien. Pero que sepas que me hacía mucha ilusión ser tita.
Las cuatro reímos, y continuamos hablando toda la tarde.
...
Ya casi es la hora, creo que voy a pasar a recogerla por donde está con las chicas. Camino hacia allí tranquilamente por la calle. Ya las veo, sentadas en la terraza de ese bar; me acerco pero algo me distrae de mi camino.
Un chico con las mismas características que Eva me había descrito a Adrián, parece observarlas desde la esquina de la calle. Veamos si es él, empieza el plan.
...
Me suena el teléfono.
- Mi amor dime, estoy aquí con las chicas.
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Finales inesperados para cuentos inexistentes
FanfictieMe llamo Eva y tengo 12 años. Desde pequeña llevo dos trenzas que rara vez me quito; mi abuela me enseñó a hacérmelas y me gusta mucho como me quedan. Mis tres mejores amigas son Sam, Mai y Nia y a la hora del patio ensayamos para grabar TikToks aun...