Capítulo 10

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-No te vas a ningún lado- me dijo Thomas.

-Quiero que me digan, cuando vuelve mamá y dónde está Cami- les ordené.

-Mamá no va a venir ahora, nos dijo que estaban con varios problemas y se iban a quedar en un hotel para estar más cerca e ir a la empresa a primera hora- dijo Seamus.

-Camila, está en la casa de su amiga, la vecina- agregó Thomas.

-No te vayas, yo te super amo, además de ellos, que nunca vi que alguien hiciera lo que ellos hacen por ti- me dijo Amy. Ella me lo había ocultado,  pero sé que no lo había hecho a propósito,  conociéndola. Aunque también pienso que Lauren, tampoco lo había hecho a propósito, pero no voy a aflojar y quiero que sepan, que yo jamás los voy a dejar.

-¿A dónde te vas?- me preguntó Seamus.

-Me voy a ir, aunque no quieran. No preocupen a N-A-D-I-E. Voy a volver antes de que mamá llegue- les dije y resalté la palabra Nadie.

-No, Emily- me dijo Lauren casi llorando y Thomas la abrazo.

Los miré furiosa.

-¿Sabían que todo esto, lo hicieron ustedes, tortolitos? Si me lo hubieran contando, nada de esto hubiese pasado- les dije revoleando los ojos.

Salí de la casa, iba a pasar un tiempo muy feo. Afuera, y sola.

Caminé y me fui de ahí. La gente que me conoce, me miraba raro.

Yo saludaba con la mano y seguía rumbo. No pude detener mi mente. Ya empecé a pensar en todo. Pero todavía, no puedo creer que ellos no sepan, cómo soy yo. No puede ser. Una lágrima resbaló por mi mejilla. Pero no puedo llorar en la calle. No lo puedo aguantar, ni un poco de atención me prestan.

Ya veo cómo las lágrimas resbalan por mi mejilla.

Narra Thomas:

Se fue, mamá no se puede enterar de esto.

-Te amo, mi hermana lo va a entender y va a volver- le dije, me partía el alma que llorara. Es tan linda que no puedo conmigo mismo. Soy un chico, y soy humano. No resisto todo. Y menos a esta chica.

Me abrazó y ya me rendi a sus pies. Me re puede.

-Sos tan importante como mi hermana, y me parte el alma que llores, así que ya no lo hagas- le dije y me sonrió.

Hice como una seña de que me estaba matando, las lágrimas que corrían por sus mejillas, y su sonrisa cubriendo esas lágrimas. Cuando le hice la seña soltó una carcajada.

-Yo también te amo- me dijo.

No puedo pasar el rato, si me va a estar diciendo todas esas cosas tan lindas. Me acerqué a ella, cuando estábamos frente a frente, y esos ojos tan lindos que tiene me miraban fijo, le susurré:

-Me matas, no me aguanto estar cerca tuyo con esos ojos, esas lágrimas, esa boca- le dije acercándome más, hasta que nuestras respiraciones ya estuvieran conectadas y sus labios chocaran con los mios.

No puedo pensar en nada más que en ella. Estuvimos pegados, ella con sus brazos enredados en mi cuello y yo con mis manos en su mejilla. Nos separamos por falta de aire. La miré y me sonrió tímida. Saqué las lágrimas que todavía estaban en sus mejillas. Me empujó en el sillón y se acostó arriba mío. Sonreí ante su reacción. La abrazé y me quedé mirándola. Hasta que cerró sus ojos. Y pude notar que yo también estaba cansado y sentía que mis párpados pesaban.

Narra Emily:

Estaba sentada en la puerta de una panadería. Acurrucada para mantener el calor, la noche era bastante fresca. Saqué la campera que había guardado en el bolso. No puedo más, todo lo que estoy haciendo por ellos. Ojalá que lo entiendan. Las lágrimas de nuevo, corriendo por mis mejillas. ¡Qué horror!

-¡Paris! ¿Estás bien?- me gritó Weston, corriendo hacia mí.

No puede ser. La verdad no sé cómo hago para encontrarme con él todo el tiempo.

-¿Estás bien?- volvió a gritar.

Levanté mi cabeza sin pensar en las lágrimas que corrían por mis mejillas. Estaba con un chico más. Era lindo. Me sequé las lágrimas rápidamente, y con la cabeza agachada. Se acercaron.

-Hola Weston- le dije sonriendo.

-¿Me vas a decir qué pasa?- me preguntó.

-Nadaaaaaa- le dije haciendo que riera.

-No me queres contar, eh- me dijo arqueando una ceja.

-Nop- le dije divertida-¿No me vas a presentar a tu amigo?- seguí divertida.

-Nop- dijo y rió. Yo arque una ceja-Bien, él es Jacob.

Sonreí y le tendí mi mano.

-Yo soy Emily- le dije graciosa.

Rió.

-Pero, ¿Tu nombre no es, París?- me dijo Jacob y lo mire a Weston.

-Preguntale al acosa.. emm digo a tu amigo, Wes- le dije riendo y él sólo lo miró a Weston confundido.

-Es una larga historia, cuando la conocí se enojó conmigo y no me quiso decir su nombre. Entonces, vi su collar y me gustó para decirle así- le explicó Wes.

Agarró mi mano y empezó a escribir un número.

-¿Son hermanos?- dije tratando de soltarme.

-Si no me agregas, te voy a buscar- me dijo serio.

Fruncí el ceño. ¡Lo odio!

-Ya lograste lo mismo que logró Wes- le dije mirandolo furiosa.

Weston rió. Jacob miró a Wes que reía.

-Por lo menos, conseguí tenerte- me dijo mirándome con las cejas arriba.

Entonces, agarré la mano de Jacob y escribi mi número.  Sé que me iba a arrepentir, pero quería hacerle la contra a Weston.

-Él te gano, ya tiene mi número- le dije desafiante.

Me paré, agarré mis cosas los saludé con la mano y me fui. Ya eran las 11 de la noche. Caminé durante una hora.

Llegué y me quedé sentada, afuera. Para que no me vieran.

Me quedé sentada una hora más para asegurarme que estaban todos dormidos, y así entrar.

Casi me duermo. Pero entonces me paré y abrí muy despacio la puerta para no despertar a nadie. Entré y no pude con mi genio.

Estaban Thomas y Lauren en el sillón dormidos juntos. Lauren encima de Thomas. Eran tan lindos. Subí muy despacio. Entré a mi habitación y estaba Amy durmiendo en mi cama. Era muy dulce, dormía como un angel.

Saqué las dos colchas que tenía en el placard sin hacer ruido. Con una tapé a Amy. Y salí con la otra en la mano. La puerta de Seamus estaba abierta. Me asomé y lo vi, estaba despierto y con lágrimas en los ojos. Y me vió. No podía pasarme esto. -Emily, ¿Sos vos?- me dijo llorando desconsoladamente.

Entré con mis dedos en la boca, diciéndole: "shh"

-No, soy tu mente, estás soñando- le dije entrando y con la manta de su cama, tapandolo. Vi que sus ojos se cerraban y salí.

No escuché nada más. Bajé y con la manta tapé a Thomas y Lauren. No podían ser tan lindos todos. Me dolía mucho ver Seamus llorar y Más por mí. Pero después de esto que estaba haciendo me iban a entender y los iba a perdonar. Fui a la habitación de Thomas, agarré las mantas de su cama. Y me encerré en el baño, con las mantas adorné la bañera para dormir.

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HOLAA! No puedo creer ya llegué al capítulo 10! Es increíble me siento muy contenta. Agradezco a las personas que me acompañan en esto!! Las amo. Gracias por leer. Si les gusta voten, pliss..

Besos.

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