"El amor es un sentimiento hermoso que llega sin avisar y te cambia la vida"
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La azabache se encontraba comiendo un delicioso desayuno mientras veía una película de Disney. Hasta que su celular sonó, lo reviso y sin pensarlo dos veces contestó la llamada.
—Buenos días, linda ¿Ya te llego el desayuno?
—Sí, gracias —dijo al tragar lo que tenía en su boca— Justo ahora lo estoy comiendo.
—No tienes que agradecer —se escuchó una corta risa— Entonces te dejo para que comas.
—Esta bien pero antes de irte, dime ¿como te ha ido hoy en el trabajo?
—Bien, un poco cansado por los arduos ensayos. Pero te tengo una buena noticia, hoy me darán la tarde libre y noche ¿Que tal si salimos?
—Súper, claro que sí.
—Ya nos hace falta, te extraño mucho. Por cierto ¿como sigues?
—Bien, hoy es mi último día del periodo.
—Me alegro mucho. Bueno, entonces paso por ti a las 3pm.
—Esta bien Minnie, nos vemos
—Nos vemos, linda.
Fin de la llamada.
Estos días a causa del trabajo de Jimin, no se habían podido ver. La empresa mantenía muy ocupados a los chicos.
Sin embargo, él nunca dejó de estar pendiente de Leidys. Diariamente la llamaba por las mañanas y noches, le mandaba comida para que no tuviera que cocinar y le pedía disculpas por no poder estar con ella para cuidarla, ya que no quería que se sintiese mal teniendo su periodo. Ese fue el gesto más lindo que habían hecho por ella en su vida.
Todo era tan diferente a cuando estaba con James, él la evitaba totalmente estos días. Jimin en cambio hacía hasta lo imposible para poder estar al tanto de lo que le sucedía, aún estando ocupado.
Continuó comiendo y al terminar seguío viendo la película, hasta que de un momento a otro se quedó profundamente dormida.
Despertó por la vibración de su celular, lo tomó y vio que tenía varías notificaciones de mensajes.
Zoe: —Lys, me tocó hacer horas extras en el trabajo. —Así que no me esperes despierta. —En el refrigerador deje algo de comida, calientala y cena con eso. —Cuidate mucho, estamos hablando.
