Capitulo 10: La fuga

278 13 3
                                    

ZULEMA:

La rubia había sido la última en unirse a la fiesta que teníamos montada las presas, a Sandoval le quedan dos telediarios de vida, porque ese cabrón va a pagar por todo lo que hizo. Sandoval corría como una cucaracha a esconderse de todas las presas que le perseguíamos. En cabeza de toda la banda que se venía encima íbamos la rubia, jessica y yo.

Sandoval corría por el pasillo del modulo hasta llegar a la puerta donde Millán un poco asustada le daba al botón de la puerta para que se abriera sin control, y también para cerrar, pero antes de que se cerrara la rubia y yo nos metimos en medio para sujetarla y que las presas pasaran.

Z: pasad putas. ¿Por qué has vuelto rubia?

R: porque ni tu ni yo vamos a cambiar la cárcel. Pero a veces hay que hacer lo que hay que hacer.

Z: vamos a por la Barbie. A antes de que matemos a ese puto eunuco, te presento a Jessica, ingreso hace poco.

J: encantada, Jessica, más conocida como la diabla.

R: encantada diabla, soy macarena, bueno aquí para todos soy la rubia o la mosquita muerta, pero ahora vamos a por la Barbie que se nos escapa.

Corrimos a por la Barbie, Jessica no sabía todo lo que este hijo de puta nos ha hecho, pero sabe lo asqueroso, e hijo de puta que es.

Sandoval se había encerrado en la oficina de la enfermería, y la rubia, jessica y yo íbamos a por él. Pasamos las tres hablando tranquilamente.

Z: vaya, rubia, menos mal que has venido. Pufff.

R: somos la extraña pareja ahora.

J: como que pareja, y yo que malparida.

De repente paro a la rubia con la mano en medio del pasillo que llevaba a la enfermería. Me mira extrañada con cara como de que pasa. Retrocedo hasta la puerta y miro por el circulo de cristal que hay. Pego un golpe a la puerta.

Z: Sandoval! huelo tu perfume por toda la cárcel.

R: y tu miedo...

J: oigan les dejo aquí que ajusten cuentas con este cerdo, yo me voy con las otras.

Z: tu diabla, luego te busco. –le guiño un ojo, para que recuerde que hoy mismo nos íbamos de ahí, y ella me devuelve una sonrisa de lado y asiente.-

R: abre la puerta, Barbie.

Z: o soplare y soplare y la puerta derribare!

S: esta viniendo un ejército, y lo mejor que pueden hacer es volver a sus putas celdas! Hagamos de cuentas que acá no paso nada ¿si?

Z: ¿Qué no ha pasado? ¿El motín no ha pasado? ¿¡ MI HIJA NO A PASADO?! ¿¡ ABRE?! – grito mientras golpeo fuerte la puerta, y me entras más ganas de matarlo.-

R: Sandoval , abre la puerta, estas en fase de negación, Sandoval. Y como psicólogo deberías saber que el primer paso es aceptar la realidad. La realidad es que estas jodido.

La rubia pega un tiro a la manilla de la puerta para abrirla y yo de una patada la termino de abrir. La rubia me da la pistola y no va conmigo por no se que no la entendí, así que seguí sola.

Entro a la enfermería y cierro la puerta pongo una camilla atrancando la puerta para que nadie pueda entrar, y luego me siento encima de ella a horcajadas.

( aquí os dejo un enlace de un video de los que pasa en este capítulo, y para no tener que escribir todas las escenas os dejo esto por aquí IMPORTANTE: verlo antes de continuar leyendo)

Ya había tenido la larga conversación con Sandoval en la enfermería, pero ya llega su hora de irse al puto infierno. Lo saque de allí a punta de pistola, y lo lleve al comedor donde estaban todas las presas, una a una clavo la estaca con la que mate a hierro. Cada puñalada que le daban Sandoval iba cayendo poco a poco al suelo, y cada puñada que daban era por algún acto que Sandoval había hecho a las presas, cada puñalada era de venganza y de alivio, porque sabían que ese cerdo ya no iba a gastar una gota más de aire.

En cuanto a sole le dimos el entierro que ella quería que fuese. La quemamos en una hoguera, como ella pidió, para que, según ella, se purificase su alma, y descansara en paz.

Cuando sole se estaba quemando, fui a buscar a la diabla, previamente me había despedido con Saray, de la rubia también.

- Diabla, levanta el culo que nos largamos de esta mierda.

- Chaaaaa, porfin mija!

- Nos está esperando un camión infiltrado que transporta las gallinas atrás de la cárcel, así que mueve el culo antes de que estos hijos de puta entren.

Atravesamos toda la cárcel para llegar a la otra punta y montarnos en ese camión e irnos, mientras corríamos hacia la otra punta, Jessica iba un poco rezagada.

- Joder tia, vas muy lenta, a este paso nos cogen.

- Es que no puedo evitar mirarte el trasero mientras corres, se te contornean las caderas y me hipnotizo. –dice mientras se para a coger aire.-

- Jessica joder cállate y déjate de  gilipolleces, y corre coño.-

Se vuelve a incorporar, pasa al trote delante de mi y me roba un beso, y echa a correr rápido.

- Puutaa.-

Corrimos y al fin llegamos al parcking, donde ya nos esperaba es camión, jessica me dejo en mis manos a donde quería ir, pero quería seguir llevando su negocio a distancia mientras pasaba un tiempo hasta que nos dejaran de buscar.

Yo dije que nos llevaran a marruecos, el camión nos iba a llevar a un descampado donde había un coche robado que conduciremos hasta llegar a una pista donde una avión nos espera con hombres de jessica, y que nos llevaran a marruecos.

JESSICA:

Nos subimos a la camioneta que nos iba a llevar a nuestro destino, antes de subir zuelma le dijo unas palabras en árabe al chofer.

- Vamos diabla, súbete que nos vamos.

- Zulema tenemos que cambiarnos de ropa.

- No te preocupes diabla, aquí tenemos una maleta con algo de ropa para cambiarnos, mientras que llegamos a marruecos.

Yo me puse un chándal gris, con una camiseta de color blanco y por encima una sudadera de color negro, con unos zapatos con alzas color blanco.

Zulema llevaba un pantalón negro, con una cadena que colgaba, unas botas negras y una sudadera con un dibujo de frozen en la parte frontal.

- Toma, diabla, aquí tienes un teléfono, para que puedas contactar con tus hombres, ya me encargue yo de que en la lista de contactos estuvieran los números de tus hombres.

- yo tengo otro, para poder controlar todo, luego nos desharemos de ellos y compraremos otros, para no dejar pistas.

- Vale, cuanto tiempo ahí que esperar, para llegar a coger el otro carro?

- Como dos horas, dos horas y media. No está demasiado lejos. Luego conduciré hasta donde está el avión que nos llevara a la casa temporal de marruecos.

Pasaronlos minutos y no sabíamos muy bien de que hablar, Zulema me ponía nerviosa, megusta estar con ella, y tampoco se que habar con ella por que es demasiadoespontanea pero me encanta que sea así. 

___________________

Siento tardar tanto en actualizar. Si queréis podéis darme ideas de cosas que os gustaría que pasara en la historia, acepto todo, lo podéis dejar por los comentarios. 

no os olvidéis  de votar si os gusta. 😊😊



ZULIABLA - Zulema X Jessica Beltrán Donde viven las historias. Descúbrelo ahora