ZULIABLA - Zulema X Jessica Beltrán

Capítulo 11: Sendero

JESSICA:

Al fin pasaron esas dos horas que llevábamos metidas en esa camioneta que olía a gallina horrible. Zulema y yo hablábamos de cosas puntuales sobre la fuga, yo tampoco me atreví a sacar un tema de conversación.

Llegamos a un descampado bastante alejado de la ciudad donde nos esperaba un carro de color negro, con los cristales traseros tintados.

- Diabla, por fin llegamos a nuestro destino. Vamos a conducir hasta Málaga y luego cogeremos el avión que nos estará esperando en una pista forestal abierta, en cinco horas o algo más de cinco horas llegaremos allí y nos iremos a marruecos, luego cuando estemos allí ya veremos que hacemos.-

Nos posamos de la camioneta que nos transportaba un poco alejadas de donde nos estaba esperando el carro con el que íbamos a ir hasta Málaga, caminamos unos metros hasta él.

- Zulema reina, y vamos a estacionar en el camino en algún hotel o como así.-

- Si diabla, tengo preparados dos pasaportes falsos, y dos identificaciones también falsos, y en el coche tenemos más ropa y algo de comida, y también hay pelucas para ocultar nuestras identidad por si nos reconocen hasta que lleguemos a marruecos.

- En marruecos que clima hace?-

- Diabla sube al coche y luego te explico que nos tenemos que ir de aquí.-

Nos subimos al carro y salimos del descampado dejando tras de nosotras una gran humareda de polvo.

Ya llevábamos ya dos horas de conducción y Zulema se paró a echar gasolina en el carro. Cunado agarramos el carro estaba el tanque a la mitad.

- Eh, Diabla, ¿quieres algo?

- No, gracias, así estoy bien. –le doy una pequeña sonrisa y agarro mi teléfono.-

- ¿seguro que no quieres nada? Aún nos quedan por lo menos tres horas de viaje.

- está bien Zulema, agarra lo que quieras de comer o no sé, me da igual.

- ¿ a quién llamas?

- ¿ te importa demasiado?

- Por supuesto que me importa imbécil, si nos cogen por tu culpa y el puta teléfono no tienes Colombia para correr. –dijo agarrándome del brazo y apretándome.-

- Soltame, Zulema –dije intentando deshacerme de su agarre.-

- Voy a echar gasolina, ahora vuelvo.-

Yo gire la vista, estaba un poco molesta. Me centre en lo que estaba haciendo, iba a llamar a mis hombres para decirles que llevábamos dos horas de viaje y que posiblemente nos alojaríamos en un hotel.

Zulema volvió rápido.

- Toma diabla. –dice subiéndose al coche y dándome golosinas, papas fritas, y demás.-

- Que es esta cagada Zulema.

- Como que que es esta cagada. Que va a ser comida.

- Yo no como esta mierda, que tiene muchas calorías, y además lleva gluten. –zulema me miro con cara de estarás de coña, como dicen en España.-

- Diabla, no me toques los cojones maja, es lo que hay, si no te gusta te jodes.

- Es broma, zule no te enfades. –le digo mientras poso mi mano izquierda en su muslo y le doy una sonrisa de lado.-

Noto como Zulema se sonroja y de una rápido movimiento me quita la mano de su pierna y enciende el carro.

- A zule, se me olvidaba, preguntarte.-