Horas antes de la que quedamos con Pablo, a Horacio se le ocurrió pintarse el cabello y escoger su ropa y de paso estaba escogiendo la mía.
—¿Esta? — sacó una falda blanca y un top de el mismo color.
Negué con la cabeza. Mientras que mi amigo de la cresta veía la ropa, yo le pintaba las uñas de color negro a Gustabo. Cuando le pregunté si quería me había dicho que no, pero ahora estaba muy dejado.
—¿Esta? — sacó un conjunto negro, la falda era de cuadros y la parte de arriba era una blusa que me llegaba un poco más arriba del ombligo totalmente negra.
La miré por unos segundos. No se me vería el ombligo ya que la falda lo taparía. Asentí.
—Me sirve.
Aventó la ropa a la cama y ahora el estaba escogiendo su ropa.
Cuanda termine de pintárselas, le comencé a mandar mensajes sin sentido al super porque sí.
—¿Qué haces?— me preguntó Gustabo, acercándose para ver el celular.
—Le mando mensajes al super hasta que conteste.
Faltaban unas tres horas, así que decidí meterme a bañar. Tomé la ropa que escogió Horacio, además de mi ropa interior, y les avise que me iría a bañar.
Al terminar, en el baño me puse mi ropa, tomé la secadora y comencé a secarlo lo mejor posible porque Horacio quería pintarlo con esa pintura que dura tres días.
Salí y fui a buscar mis zapatos, escogí unas botas de plataforma.
—Siéntate— me ordenó Horacio.
Le hice caso y el comenzó su trabajo, de pronto, un mensaje llegó a mi celular.
Daddy
¿Qué coño quieres?
Nada:*
Solté una leve carcajada.
Gustabo fue a escoger su ropa, y por el espejo que había enfrente, pude ver el atuendo de Horacio. Llevaba una de mis faldas, esta era negra con un brillo dorado al final de esta. Llevaba un top que le hice yo y unos zapatos de plataforma. Le gusta vestir así y a mi me gusta que se sienta bien, así que le cumplía sus caprichos con la ropa.
Cuando terminó los mechones, lo cuales eran de color azul y estaban dispersados por todo mi cabello, continúo con un leve maquillaje, que solo consistía en un leve delineado, un poco de rimel y un brillo en los labios.
Gustabo no iba tan arreglado, solo cambiaba su chamarra por una más ligera y de color negro.
Tomamos nuestras cosas y caminamos al carro.
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No fear || Jack Conway
Fiksi Penggemar¿Qué pasaría si te dijera que Gustabo y Horacio llegaron con alguien de México? No, no son los famosos hermanos Escobilla, pero ¿y si ese "alguien" es una mujer? Mónica Hernández, una mexicana a todo dar, si no la provocas, claro.