Rainy Star 💜💙✨

Capítulo 12 Tu marca

Cuando el reloj marcó las 5:00 a.m. un par de ojos almendra se abrieron lentamente, no era como si necesitara una alarma. Él simplemente se levantó y comenzó a acomodar el colchón que había utilizado como cama, tal vez fue por estar tantos días recostado en una cama de hospital que su cuerpo aún se sentía demasiado débil, se tambaleó mientras acamodaba los edredones y por un momento enterró su cara en el gran bulto. Quería dormir un poco más. Pero XiChen suprimió su deseo y se levantó, comenzó a arreglar todo lo que se había dejado pendiente.

En el primer piso de la tienda caminó de un lugar a otro unas cientos de veces, primero para acomodar sus objetos, asearse, preparar sus alimentos y reparar los daños que causaron los invitados no invitados. Gracias a que los ancianos limpiaron los cristales y el polvo que se acumularia no tuvo que pasar por esta actividad.

XiChen midió el tamaño del marco que había sido roto. Con las medidas obtenidas fue a comprar lo que necesitaba.

A solo treinta minutos después de que se fuera, Jiang Cheng apareció en la calle contraria.

Su caminar era pausado y tranquilo, como si hubiera salido simplemente a dar un paseo por la ciudad. Sin embargo, su mente ya era un caos.

«—¡Waaaa! ¡Al final realmente terminé viniendo!»

Su autocontrol había llegado a un buen nivel. Mientras se paraba sereno al otro lado de la calle esperando el cambio de luz para cruzar, internamente temblaba sistemáticamente. Su cuerpo se elevó en temperatura y su corazón galopó sin riendas.

«—Me voy. —Fue lo primero que pensó cuando se paró al fin en la puerta del lugar de XiChen».

Pero a unos pasos de su huida, volteó nuevamente dudando otra vez en la puerta. De repente se sintió como un pez atrapado en el anzuelo. En su vida todo había sido tomado con firmeza ya sea una buena o mala decisión él asumiría las consecuencias sin dudarlo. Mas, aquí estaba, dudando si tocar una simple puerta.

—¿A-Cheng? —Alguien preguntó desde atrás.

Jiang Cheng quedó estupefacto ante el llamado. Porque él sin duda alguna reconocía la voz. Cuando volteó lo vio parado, llevaba unas bolsas colgadas de sus brazos y un gran paquete con forma rectangular. Pero a diferencia de la primera vez que lo vio en este lugar, era como si las varias cosas no existieran. Solo podía verlo a él.

Con el sol tocando suavemente su rostro. Con la brisa fresca del otoño soplando en sus cabellos. Puede que haya corrido de un lado a otro, su rostro parecía tener un rastro de rubor. Y una fina capa de sudor se había formado en su frente. Lejos de verlo desliñado, su apariencia le pareció refrescante; sin embargo, aún sentía un extraño calor intentando sofocarlo.

—¿El joven WanYin vino a comprar comida para Kari? —XiChen volvió a preguntar.

—Jov... —Jiang Cheng de repente sintió un agrio sabor en su boca. Empezó a odiar rotundamente el ser llamado de esa manera distante. ¿Por qué cambiar de repente? Si era XiChen entonces estaba bien ser llamado A-Cheng. Y ahora va y cambia como si nada. Un sentimiento confuso se arremolinó en sus entrañas; pero, aún así no protestó y siguió respondiendo—. Sí, vine a comprar.

—Lo siento, ¿tocó muchas veces el timbre?

—... —Jiang Cheng no pudo responder y decirle que aún no se había atrevido ni siquiera a rozar la puerta.

—Salí a comprar algunas cosas. Perdón por la espera, le atenderé en un momento. Mientras tanto pase. —XiChen hablaba cortésmente mientras sacaba su llave y abría la puerta.

Jiang Cheng lo siguió en silencio. A pesar de que gran parte de su nerviosismo fue aplacado aún tenía caliente el pecho. Al entrar a la tienda encontró que todo estaba impecable, a pesar de que en algún marco claramente faltaba el vidrio, todo lo demás estaba en orden. Incluso más impecable que la primera vez que entró a la tienda.