Capítulo 19 Me gusta...

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—Eeeeeeeeeh...

La voz de Mao se alargó desganada, en el piso podía ver claramente una bota agonizante. ¡El cuerpo del delito seguía en la escena del crimen!

—Ven aquí pequeña sabandija... —Mao con los ojos oscuros y las manos en la cintura llamó al baterista casi susurrando.

—¡¡¡Jiiiiiii!!! —El joven instintivamente comenzó a chillar por su vida.

—¡Ven aquí! —Mao tomó del cuello de la ropa al otro al ver que no lo obedecía.

Un rato después todos los miembros de SMao estaban haciendo una reverencia de disculpa a XiChen y a Jiang Cheng que estaba a su lado. Mao bajó la cabeza de su baterista aún más y este al mismo tiempo presentaba un tributo con sus dos manos. La bota era presentada como sacrificio al altar.

De un manotazo Jiang Cheng rechazó la ofrenda. El baterista tenía la cara oscura, normalmente era más atrevido pero el aura asesina de Jiang Cheng no había disminuido ni un poco, había aplastado y pisoteado todo su valor.

—¡Perdón! ¡No volveré a entrometerme entre ustedes dos! —gritó sinceramente y agregó con el doble de volumen—: ¡¡Juro que no sabía que era tu pareja!!

«—La regó».

Pensaron al unísono los otros tres miembros de SMao mientras se volvían de piedra en sus sitios.

El estudio volvía a estar en caos. La curiosidad empezó a roerles los huesos nuevamente y con ojos brillantes observaron al par esperando como lobos hambrientos por un trozo de carne. Incluso si este menú solo incluyera unos pellejos, definitivamente sería una grandiosa cena.

Mientras tanto Jiang Cheng y XiChen quedaron perplejos en sus mismos sitios con los ojos abiertos de par en par. Pero, gradualmente la molestia en Jiang Cheng se esfumó inexplicablemente. Él no entendía como el sabor amargo en su estómago comenzaba a diluirse sin dejar rastro solo al escuchar esto.

—Ahora que lo sabes, entonces no lo vuelvas a hacer. —Sentenció sin pestañear.

Los lobos hambrientos recibieron su alimento, ¡una presa entera!

—¡¿A-Cheng?! —XiChen entró en pánico—. ¡¿Qué estás diciendo?!

Jiang Cheng le tomó de la mano y siguió hablando.

—¿No es mejor así? —Se acercó a XiChen—. Si todos piensan que eso es verdad, dejarán de fastidiar.

«—¡¿Se da cuenta de que aún podemos oirlo?! —La perplejidad en los presentes se extendió, haciendo que sus mentes se unificaran—, el joven WanYin acaba de volverse loco o...»

XiChen estaba el doble de perplejo. Sus cejas se apretaron con impotencia.

«—¡Esto solo lo va a empeorar! —gritó internamente».

—Esta bien —dijo a XiChen y luego volteó a ver a los demás—, ¿por qué seguimos parados aquí? ¿Las grabaciones terminaron? Si eso es así —dijo y volvió su mirada a XiChen—, él y yo ya nos vamos.

Frente a la mirada atenta del equipo de producción, el elenco entero de actores y bailarines, y frente a SMao —los jefes—, Jiang Cheng se llevó a XiChen.

Y de la misma forma en la que llegaron —tomados de la mano— se fueron.

«—Jiang Cheng estaba celoso... ¡A Jiang realmente le gusta XiChen...! —Las mentes en el estudio no podían salir del estupor, Jiang Cheng en verdad les entregó una presa muy jugosa; sin embargo, luego sintieron algo de simpatía, a Jiang Cheng le gustaba su compañero XiChen; pero, ¿y XiChen?».

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