Una Grindelwald en Hogwarts

Fiesta de Slughorn

Otro día había comenzado en el castillo, hoy era la fiesta de Slughorn.

Elizabeth fue a desayunar tranquilamente y se dirigió a la mesa de los Gryffindor.

-Hola chicos, chicas - les sonrió mientras se sentaba junto a Ginny.

-Hoy es la fiesta de Slughorn - Mencionó la pelirroja a lo que Harry, Hermione y Elizabeth, que se encontraban ahí, asintieron.

-¿A quien llevarás Mione? - preguntó Harry.

-Es una sorpresa, chicos - respondió sonrojada.

-¿Tu Harry? - Elizabeth preguntó.

-Invité a Luna.

Todos seguían hablando y haciendo arreglos sobre con quién irían esa noche o que trajes usarían, hasta que las tres chicas quedaron en prepararse luego del almuerzo las tres en la sala común de los leones, Elizabeth estuvo de acuerdo y siguieron comiendo, hasta que Mione y ella fueron a la biblioteca mientras que Harry y Ginny iban a hacer algunos arreglos para el próximo partido de quidditch.

En la biblioteca ambas chicas estaban sentadas en un lugar apartado de las demás mesas, donde podían estar tranquilas y hasta hablar tranquilamente sin molestar a nadie.

-¿Crees que aquello sea real? - preguntó Mione temerosa.

-No lo sé, Hermione, solo nos queda averiguarlo esta noche - levantó los hombros.

-¿Pero que haremos si nos invita algún tipo con otras intenciones?

-Habrán profesores que puedan ayudarnos con ellos, de verdad Mione, no hay nada de que preocuparse - la castaña asintió y luego siguió leyendo su libro.

La hora del almuerzo había pasado, John y Elizabeth habían hablado cuando ella fue a su sala común para buscar su vestido, la esperaría fuera de la sala de los leones y partirian juntos una vez listos, hacia el lugar de la reunión. Todo estaba preparado.

-Hermione, dios mío, ese color no va con ese vestido - le decía la pelirroja, ya habían pasado unas horas, faltaban minutos para que la fiesta comenzara.

-Ginny da igual, no vamos a lucirnos demasiado - sonrió mientras se colocaba el labial que la pelirroja le entregaba y combinaba con su vestido rojo opaco.

-Chicas en serio, dejen de discutir por eso - Elizabeth salía del tocador con un vestido verde esmeralda que llegaba arriba de las pantorrillas, justo para que pudieran notarse unos zapatos negros de tacón finos y hermosos que combinaban muy bien con el vestido.

Traía también el cabello recogido en algo simple, no muy voluminoso y su rostro estaba decorado por poco maquillaje que hacia resaltar sus ojos. Las chicas la miraron con una gran sonrisa.

-Te ves hermosa Elizabeth, John va a estar asombrado.

-Gracias Ginn pero solo somos amigos.

-Liz, Ginny tiene razón te ves hermosa.

-Bueno ustedes también veo que están listas y se ven magnificas - ambas leonas asintieron.

-Creo que ya es momento - las dos leonas asintieron y salieron del lugar con dirección a sus parejas.

En la sala común se encontraban Ron y Lavender muy engatusados, mientras McLaggen esperaba a alguien, otras muchachas hablaban entre ellas por lo bien que se veía Cormac y lo afortunada que era aquella chica y otros muchachos que solo hablaban de quidditch, mujeres entre otras cosas.

Las tres mujeres comenzaron a caminar en dirección a la puerta mientras que los que estaban ahí comenzaban a voltear a mirarlas, hasta los dos enamorados las veían impactados por su belleza.