🖇

1.1K 132 3
                                    


Era un día soleado, con la temperatura perfecta y un dia libre, donde paseaba por la ciudad. Una fecha festivaba tocaba, por lo que las calles estaban repletas de todo tipo de gente. Esa fecha, era tu favorita.

Lo que más te llamaba la atención, era la cantidad de parejas que habia. Y como no, en San Valentín, las parejas salen a celebrar el aprecio mutuo que tienen hacia otros seres. Mientras caminabas mirando cada vidriera, esperan a encontrar lo que buscabas.

Tenías planeado comprar regalos para tus amigos, por que no sólo el dia del amor, sino de la amistad, donde tu te guiabas más por ese camino. Sólo te faltaba un regalo, y ese era para Iida, querías que fuera perfecto, después de todo se lo merecía. No sólo por que "compartan ideales" sino que también, por que se tomó la molestia de ser tu amigo, conocerte y aprender tu idioma de a poco.

Mientras iba vidriera tras vidriera, buscando el regalo perfecto para el. Paraste en seco al ver unos muy hermosos anteojos, iban a ser perfectos para el, entraste y los pediste, costo casi un ojo de la cara, pero lo compraste igual.

Decidiste darte un receso e ir a tomar algo, fuiste a un café y pediste un batido. Mientras esperabas tu pedido, decidiste ver cada uno de los regalos, entre eso, una idea paso por tu mente. Decidiste sacar parte del regalo de Kemy, que era un set para armar biyuteri, sacaste un hilo que tenia los colores del arcoiris y lo pasaste por una de las varillas del anteojo, después fuiste con la otra.

Por último, sacaste letras del set y escribiste el nombre a quien le dedicabas ese regalos. Cuando por fin quedó terminado, lo admiraste y quedaste fascinada por el resultado.

Tu pedido llegó y decidiste dar un sorbo a tu batido, mientras observabas a tu alrededor. Notaste como un grupo de amigos intercambiaban regalos y viste cada uno de esos presentes. Miraste el que le ibas a dar a Iida y una bajon de tristeza te llegó.

Pensaste que tu regalo era muy infantil, que tenía poco esmero así que lo guardaste, para no seguir deprimiéndote. Luego de un rato, pagaste y te Fuiste, volviendo por el mismo camino, teniendo esperanza en encontrar algo mejor para Tenya.

Buscaste y buscaste hasta el atardecer. Para tu mala suerte, no encontraste nada, a excepción de unos chocolates. Estabas por ir hacia la parada de trenes, cuando una voz te detuvo, la voz que no querías llegar a escuchar ese mismo dia.

Te diste vuelta sobre tus talones y te encontraste con el trío de amigos de la U.A, Ochako, Izuku y Tenya, estos se acercaron a ti con una sonrisa.

- ¡Aiko-Chan! Que sorpresa verte aquí.

- Si, que sorpresa, ¿has estado aquí desde temprano?

Pregunto el peli verde, a lo que asentiste. Dirigiste tu mirada al muchacho más alto del grupo, este se encontraba levemente sonrojado y sólo te había saludado con la mano, sin decir palabra alguna, por lo que te pareció algo extraño.

- ¡Oye, Aiko-Chan! ¿Quieres venir con nosotros? Pasaremos la noche en la feria y nos quedaremos a ver los fuegos artificiales.

Es cierto, esa noche iba a ver un espectáculo de fuegos. Y tenías planeado, de que si te encontrabas con ellos, darles sus regalos y también a Iida. Pero volvió a pasar aquel bajón, te quedaste dudando.

Tomaste aire, sacaste tu teléfono y escribiste, para después mostrarle a los chicos tu respuesta.

(. . .)

Te encontrabas mirando el cielo, esperando que el espectáculo comenzara. Cerraste tus ojos, el silencio se apoderó del lugar donde estabas, mientras comías los chocolates que, supuestamente, eran para Iida, sentiste como algo bajaba por tu mejilla.

Abriste los ojos y tocarse tu mejilla, ¿estabas llorando? ¿Pero porqué?

Recordaste lo que pasó hace unas horas, las caras tristes de Ochako, la de Izuku y la de... Tenya. Suspiraste y comenzaste a columpiarte de manera leve en aquel juego.

Habías rechazado la oferta de quedarte con ellos, no olvidaste sus caras, en especial la del muchacho, se lo veía decepcionado. Eso te empeoró el bajón, por lo que no volviste a tu casa, aún cargabas con los regalos y no sabías si al otro día podrías dárselos.

Sentiste un impulso, por lo que levantaste tu mirada y la dirigiste hacia atrás, encontrándote con el muchacho de anteojos. Te sorprendiste al verlo, esperabas que estuviera en la feria, no ahí, contigo.

- Aiko.

Te llamó, sentiste como sus brazos rodeaban tus hombros y apoyaba su cabeza sobra la tuya, tu aún no reaccionabas, aún no creías que el estuviera allí. Perdiéndose un espectáculo en primera fila, para verlo en la última fila.

Sentiste como se alejaba y luego viste como se ponía enfrente de ti, arrodillándose, como si fuera a dar una plegaria.

- Esta tarde te fuiste antes de que pudiera darte tu regalo.

Sentiste como la sangre subía a tu cabeza, no podías parar de verlo, esa escena nunca se iría de tus recuerdos. Notaste como el sacaba de su pantalón una pequeña caja, donde te la mostró. A él también se le habia subido la sangre a la cabeza.

- Espero que te guste.

Te extendió la pequeña caja, tu reaccionaste rapido y también sacaste su regalo, los anteojos, ya que los chocolates te los habías comido. No querías quedar mal, tampoco, tenías muchas cosas y si no le dabas algo, el pensaría que no es importante para ti.

Ambos intercambiaron los regalos nerviosos, al parecer, tenían las mismas inquietudes. Al tener la caja en sus manos, cada uno la abrió y se sorprendió por el contenido de esta. Se miraron y se sonrieron.

- ¿Te gusta? Uraraka me ayudó a hacerla.

Asentiste, su regalo para ti era una pulsera con tu color de ojos mezclados con un azul, era precioso. Esperaste a que él mencionara algo sobre el regalo que le habías hecho, tardó en reaccionar, pero dio una sonrisa de lado.

- Este regalo.. es perfecto.

Soltó sincero, a lo que tu bajón desapareció y una alegría inmensa se apoderó de ti, te lanzase hacia el, uniéndolos en un abrazo, el cual él correspondió con gusto. Ambos cayeron al suelo, pero no les importó, estuvieron así hasta que unas luces se aparecieron en el cielo, los fuegos habían comenzado.

Ambos se sentaron y observaron el espectáculo, mientras que tu tenías tu cabeza apoyada sobre su hombro y apreciabas el regalo, el te observaba con sus nuevos anteojos.

- Feliz San Valentín, Aiko.


[Especial ❤San Valentín❤]


Nota🌻: ¡FELIZ DIA DEL AMOR Y LA AMISTAD, MIS AMORES!💕
Espero que éste especial les haya gustado, quizás mañana o pasado estara el siguiente capitulo. Sólo esperen. Y felicidades.

¡Michifus se despide!❤

A silent voice- Iida Tenya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora