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Tu amiga se veía seria y se notaba que estaba formulando lo que tendría para decir.
Por tu lado, estabas algo ansiosa, querías soltar todo en ese momento pero debías calmarte y esperar a que preguntara lo que ella quisiera saber.

- Bien, vamos desde el principio ¿Desde hace cuanto que te gusta?

- "Creo que desde que lo conocí."

Respondiste para después tomarte un tiempo de silencio, mientras pensabas que decir a continuación. Soltaste un suspiro y sentiste como la sangre subía a tu cabeza, tu amiga soltó una sonora risilla.

- "Desde que lo conocí, sentí atracción por él... y cuando lo conocí aún más, me enamoró."

Confesaste avergonzada, sentías como tus mejillas ardían y un cosquilleo en todo tu cuerpo. Tu amiga aguardaba en silencio, aguantándose las ganas de reír, o eso suponías, ya que cubría su boca con su mano y su cuerpo temblaba.

- Pe-perdona, es que... Lo siento.

Dijo entre risas mientras apoyaba parte de su cuerpo sobre la mesa. Notaste como leves lágrimas brotaban del borde de sus ojos y cómo seguía temblando.
Soltando un suspiro, apoyaste la mano sobre el hombro de ella, para tratar de decirle que estaba bien que se riera de la situación, que no te molestaba.
Aquello era verdad, pero a veces era tedioso que no te tomara en serio.
Ella se reincorporo, limpiando aquellas pequeñas lágrimas de su rostro mientras tomaba el aire que había perdido entre las carcajadas.

- Lo siento, lo siento... Sabes que fue muy cursi.

- "Si, lo sé, trate de no sonar así pero no supe cómo expresarme."

Tu amiga volvió a estar en silencio, mirándote con una leve sonrisa, que podrías jurar que era una sincera, y con sus cejas arqueadas hacia abajo.

- Está bien, discúlpame por haberme reído. Es solo que... Es tierno y ah, no sé cómo explicarlo.

Ahora eras tú quien sonreía levemente, casi imitando la expresión de la contraria. Y cuando ibas a responderle, fuiste interrumpida por un muchacho, quien traía los pedidos que habrían encargado minutos antes.
Kemy le agradeció mientras le guiñaba el ojo, y notaste como su tono de voz era pícaro. Algo se traía entre manos.
Por tu lado, solo inclinaste la cabeza en forma de agradecimiento. El muchacho copió tu acción y se retiró.

- ¿En dónde estábamos?

Preguntó tu amiga, para después darle un sorbo a su bebida mientras te miraba con los ojos grandes, sabías que te prestaba atención. Hiciste un ademán con la mano, para indicarle que seguían con el mismo tema y esperabas su pregunta.

- Ah, cierto, bien... ¿Ya le has dicho algo respecto a lo que sientes?

Preguntó y en respuesta moviste la cabeza hacia los lados, negando. Tu amiga te miró con los ojos entrecerrados, como si te estuviera juzgando, para después darle un mordisco a las galletas que estaban sobre la mesa.

- ¿Ya estás segura de que te gusta?

Volvio a preguntar e ibas a responderle de inmediato, pero decidiste pensar antes de decirle.
¿En verdad te habías enamorado de él? ¿Si querías ser algo más que una chica con la que "comparte ideales"?
Te quedaste mirando tu bebida, procesando todo lo vivido estos meses ¡Alto! ¿Meses?¿Hace cuanto que lo conocías?
Decidiste sacar la cuenta de cuánto tiempo llevaban y te sorprendiste al notar que ya llevaban 5 meses conociéndose ¿Qué tan rápido había pasado el tiempo? No estabas ubicada en tiempo desde hace buen rato...
Tomaste valor y miraste a tu amiga.

- "Si, estoy segura de que lo amo."

🖇️

Ya habían terminado de hablar del tema principal, a la vez que acabaron con su merienda. Ambas se levantaron de sus lugares y se dirigieron a la salida de la cafetería.
En lo que caminaban rumbo al hogar, Kemy estaba molestándote con una sonrisa amplia y burlona, mientras que tú estabas más roja de lo habitual. No creías que tú amiga fuera tan atrevida y no creías que tú cabeza iba a jugar a favor de las menciones eróticas de tu amiga.

- Ya, ya, ya paro.

Dijo alejandose de tu espacio personal, pues ya estabas a punto de desmayarte del calor que sentías en tu cuerpo. Pues el simple hecho de imaginar a Tenya sin una camisa y encima de ti era algo tan... Ah, mejor no entro en detalles.

- Aiko, ¿Ahora que sucederá con Inasa?

Soltó de repente tu amiga. Paraste en seco sobre el camino y te quedaste viendo a tu amiga con miedo, preocupación. No sabías que hacer con tu 'amigo', ya que se notaba a leguas que estaba molesto contigo. Pero tú querías pensar en tu bienestar por al menos una vez. Inasa siempre había intervenido tanto en tu vida social tanto amorosa, que nunca pudiste conocer más a fondo a ciertas personas.

Anteriormente, en la secundaria, había un muchacho que llamaba tu atención. Te tomaste la molestia de conocer a aquel chico y él también se tomó la molestia de hablar contigo.
Con el tiempo, terminaste enamorada de él y se lo comentaste a tu amigo, Inasa, quien no había reaccionado bien y comenzó a juzgarte, diciendo también que no debías pedirle ser algo, ya que no iba a ser lo mejor. Y tú, nunca paraste para cuestionar el comportamiento tan poco maduro de tu amigo, simplemente cediste a él.
Inasa se metió tanto en tu relación 'amistosa' con el otro muchacho, que terminó por espantarlo, haciendo que se alejara de ti de la peor manera, dañandote demasiado.

No querías que esta historia se volviera a repetir, porque estabas decidida a intentar algo con Tenya por más que Inasa quisiese o no.

- "Hablaré con él más tarde."

Respondiste a tu amiga, para después tomarla del brazo y seguir el camino. La contraria notó tu determinación, por lo que no dijo nada y solo se dejó guiar por ti.

- Me alegra que por fin decidas pensar en ti.

Comentó en forma de susurro, cerca de tu oído, parando el andar de ambas. La miraste sorprendida, pero al notar la sonrisa en sus labios, tu expresión cambió a la misma que siempre tenías.
Kemy decidió abrazarte y acariciar tu cabeza. Ella siempre había sido de gran ayuda para ti y desde que se conocieron te advirtió del comportamiento 'toxico' que Inasa tenía contigo. Jamás le diste atención a eso, por miedo a perder a tu amigo de toda la vida, pero era hora de un cambio. Debías hacerte respetar, crecer, y eso ibas a hacer.
Ibas a luchar por tus sueños, por ser feliz sin anteponer al resto antes que a ti.
Te separaste de abrazo de tu amiga y la miraste con determinación, la contraria solo soltó una leve risilla.

- Aiko, me encanta ver tu progreso. Déjame ayudarte en esto.

Ofreció ella mientras tomaba tu mano para seguir caminando, tu la aceptaste sin problema y la volviste mirar a los ojos por última vez. Tenías una gran amiga.

- Se que Inasa es alguien terco, pero no es malo. Lo que hace, lo hace por tonto, por no saber afrontar las cosas.
Pero no te preocupes, yo te apoyaré en toda desicion que tomes.

Las palabras de tu amiga te llegaron al corazón, ya que nunca esperaste tal apoyo de su parte o quizás nunca lo notaste por 'cierto' chico, pero el saber que ahora tenías todo su apoyo, alivio el pesar con el que cargaba tu corazón.



[ A silent voice.]



A silent voice- Iida Tenya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora