CADA NOCHE || Finn Wolfhard Y Tú ||🔚

CAPÍTULO 26

Iris estaba impaciente, intentando buscar en su armario algunos vestidos que podría usar para la graduación que era el día de mañana. Tenía demasiados, tantos que llegue a sentirme mareada. Todos eran hermosos y para ella eran una mierda.

— ¿Cuál crees que me quede mejor? El rojo es un clásico, pero me gusta este color blanco con escote de corazón... Estás ¿Estás escuchándome?.

— ¿Que? No lo siento.

— ¿Que es lo que tanto te distrae?.

— Nada es solo, que... No se lo que quiero estudiar, ni siquiera tengo en mente que universidad debo ir.

— Entonces no lo hagas — siguió buscando vestidos.

— ¿Como?.

— Yo solo digo, que si aún no tienes claro lo que quieres dedicarte por el resto de tu vida entonces tómate un tiempo y postúlate a la universidad cuando tú mente este clara y ordenada ¡Uh! Me gusta este.

Me quedé callada por unos segundos intentando pensar en si lo que me acababa de decir Iris esté bien, digo, es cierto quiero más tiempo para aclarar mi mente. Pero no podía dejar de estudiar... No lo sé.

Al regresar a casa pude ver qué mis padres estaban tranquilamente hablando en la sala de estar mientras miraban la televisión, les sonreí y fui corriendo a mi habitación. Al entrar fui detenida por una mano que agarro con firmeza mi muñeca.

Gire mi cabeza y visualice a Finn, quien me miro con nostalgia y apretando los labios me miro de arriba abajo. No sé por cuánto tiempo nos quedamos manteniendo una competencia de miradas. Quite mi mano con lentitud mientras a paso lento entre en mi habitación sin dejar de verlo hasta que cerré la puerta.

Maldita sea, solo con su mirada tan profunda y fría hacia que los vellos de mi piel se erizarán y una corriente electrónica pasará por mi espalda, suspire.

Me dirigí al armario y visualice el vestido azul, pero levanté una ceja al ver el rojo en el suelo. Lo levanté y abrí la boca al ver qué estaba pegajoso, gracias a que el piso estaba tan sucio y húmedo.

— No, no, no ¡No! — grite.

La puerta se abrió rápidamente, me gire sin dejar de agarrar el vestido y mire a mi mamá. Quién estaba exaltada. Al ver el vestido arruinado su semblante de relajo.

—Esta arruinado, genial — lo aventé en alguna parte de la habitación.

— Hija...

— ¡Todo está arruinado, el vestido, la graduación, mi carrera, la universidad!.

Ella no dijo nada pero se acercó al armario y tomo el vestido azul que había en este, me senté sobre la cama y la mire. Pero comencé a negar.

— Ese vestido no...

— ¿Por qué no? Es lindo, elegante, y es perfecto para ti. Ahora, ¿Por qué la universidad está arruinada?.

Cerré los ojos, de lo rápido que estaba hablando no me di cuánta de que había dicho cosas de más. Mordí mi labio inferior y no me contuve y le conté lo que estaba pasando conmigo. Ella claramente se molestó un poco pero termino por aceptar que me quedara en casa hasta que lleguen las postulaciones a la universidad.

— Tendrás que trabajar ¿De acuerdo?.

Asentí — Tranquila, no te daré problemas ¡Gracias mamá! — la abrace.

Al separarnos nos quedamos en silencio mirando el vestido azul marino, era realmente hermoso. Y bueno, no tenía otra opción de vestido así que tengo que usarlo.

— Tengo que irme, duerme bien — beso mi frente y salió de la habitación.

Sonreí y tome el vestido en mis manos y lo colgué nuevamente en el armario. Ya era noche, así que debía dormirme. Mañana sería un día largo, muy largo.

En un rato el penúltimo capítulo 😭