-¡Lento! Esta es la cuarta ronda que te gano – se burló Naruto mientras comía palomitas.
-Cállate rubio, tengo años sin jugar videojuegos – le informo Sasuke mientras veía como la pantalla iniciaba el juego una vez más.
-Te pateare el trasero de nuevo – dijo el rubio mientras se reía.
-Eso lo veremos – comento mientras mostraba sus ilustres rasgos competitivos.
Después de que había llegado a casa de Naruto, había acomodado sus cosas y hecho otras cuantas cosas, el blondo le había ofrecido jugar, y por eso estaban de ese modo.
Naruto sabía estimular su lado adicto a las competencias y él se dejaba llevar muy rápido por esa razón.
Habían jugado aproximadamente dos horas ya, y el moreno sentía que su estancia con el rubio sería tan divertida como imagino. Esperaba no ser una molestia para el otro.
-¡Gane! – Sasuke sonrió victorioso y Naruto frunció el ceño mientras miraba el juego.
-Pero yo te gane más veces – se defendió.
-Pero quien ríe al último, ríe mejor – recito mientras comenzaba a reírse de la expresión que el blondo había hecho.
-¡Claro que no! Te castigare por insolente – dijo el de ojos azules lanzándole encima – Recibe mi ataque especial de cosquillas.
-¡No!
Naruto había abordado el cuerpo del Uchiha y había comenzado a hacerle cosquillas, por todo el cuerpo, haciendo que el azabache se riera y retorciera ante su toque.
-Basta, rubio…no más – le pidió entre risas, tratando de huir de él.
-No me detendré nunca – chillo mientras se reía como villano de película, causándole gracia al moreno.
-Naru… - entonces el mencionado lo escucho toser y supo que se había pasado.
-Lo siento, lo siento – se disculpó apartándose del cuerpo del otro – te traeré agua.
Al chico solo le costó unos segundos ir a traerle un vaso de agua al moreno, el cual, lo recibió agradecido, y consumió todo aquel líquido transparente.
Sasuke respiro tranquilo después de eso, y le entrego el vaso al otro.
-Discúlpame ¿ya estás bien? – le pregunto con vergüenza por ser el causante del mal ajeno.
-Sí, ya estoy bien – le dijo brindándole una pequeña sonrisa momentánea.
-Bien, voy a guardar este desastre y vendré a hacer algo de cenar – hablo el rubio mientras empezaba a recoger todo.
Sasuke negó con la cabeza y se levantó del suelo, entonces, se dirigió al pequeño espacio que servía de cocina para el rubio, y empezó a revisar la alacena, entre todos los viejos cajones no había mucho, pero lo suficiente para una persona que vivía sola.
Se encontró con un poco de arroz que aparentemente quizás le había quedado del almuerzo y en la nevera había algunos huevos y escasas verduras, pero eso serviría para hacer un omelette de arroz.
Se lavó las mano y comenzó tranquilamente a trocear los ingredientes, o sea, dos jugosos tomates que encontró y una cebolla, y escucho como los pasos del rubio se aproximan a él.
-¿Eh? ¿Qué haces? – pregunto mientras se acercaba – Sasuke, tu eres mi invitado, yo debería cocinar.
-No me importa tener que cocinar – le aclaro el azabache mientras comenzaba a batir los huevos.
ESTÁS LEYENDO
El sonido de los sentimientos
FanfictionLa vida da muchas vueltas y cuando se logra la fama mundial aún más; riqueza, fama y orgullo es lo que rodea a Sasuke Uchiha y a su banda de rock, sin embargo al llegar a Tokio y encontrarse con un chico rebelde y alegre que no los quiso reconocer...