El sonido de los sentimientos

Capítulo 45: Formas de pedir perdón. Parte I

Sangraba, su labio estaba roto, y el de su contrincante también.

Ambos se miraban con una mezcla de odio, dolor, amor y frustración, y otro golpe fue estampado en su cara.

Sasuke cayó al suelo, pero rápidamente se levantó e impacto el cuerpo del rubio, tacleándolo, para así, hacerlo caer al suelo.

Sintió como su cuerpo era apretado con fuerza y lo hacían rodar por el suelo, hasta que el blondo acabo encima de él. Sujeto con fuerza sus brazos, poniéndolos por encima de su cabeza.

Trato de forzar el agarre, para así quedar liberado, pero las manos de Naruto lo tenían bien sujetado.

-¡Suéltame! – le ordeno, logrando que Naruto hiciera un mohín lleno de enfado.

-Te soltare cuando me dé la gana – le espeto Naruto sobresaltando a Sasuke – me mentiste, no una, sino dos veces, me engañaste haciéndome creer cosas que no debía y me hiciste pasar un momento doloroso donde deseaba que estuvieras y nunca estuviste.

-No es mi culpa, ¡lo hice por ti! – Le encaró – todo lo hice para que estuvieras bien y pudieras tener una vida normal y tranquila.

-Serás inútil, estúpido Taka – le regaño – yo quería estar contigo. ¿O tu éxito es mejor que mi compañía?

-¡No! – negó de inmediato, gritando frente al rubio – no se trata de eso, es que yo no quería lastimarte más, y…mmm.

Pegajosos, resecos, pero muy dulces, así le supieron los labios de Naruto, tan ricos, tan gustosos, tan maravillosos, y le dieron inmensas ganas de seguir besándolos.

Las piernas de Sasuke enrollaron la cintura ajena y Naruto dejo libre los brazos ajenos al sentir como todo el forcejeo anterior de Sasuke se reducía a nada. Lo sintió abrir la boca y él lo imito, colando su lengua sin remordimientos en su cavidad y jugando con la ajena.

Naruto busco la nuca de Sasuke y lo empujo suavemente hacia él, profundizando su beso, volviéndolo hasta salvaje.

Todo había empezado lleno de miedo, porque Sasuke tembló cuando escucho a Naruto preguntarle sobre la verdad. Su hermano había tomado del brazo a su esposo y se lo había llevado dejándolo a él a solas con Naruto.

No había que decir lo obvio, al final, opto por contarle la verdad a Naruto y como conclusión, la frustración de ambos fue tanta que terminaron por agarrarse a golpes.

Pero ahora, que besaba los labios de Naruto, sentía que había estado incompleto por mucho tiempo.

-Ah… - Sasuke soltó un gemido en cuanto el Namikaze soltó sus labios.

Naruto solo le observo y sin siquiera pedir permiso, comenzó a desabotonarle la camisa y a desabrocharle el pantalón.

Sasuke no se negó al lujurioso acto y cooperó para que fuera más fácil.

Naruto lamio su pecho sin un resquicio de duda, zambulléndose en el embriagante aroma que emanaba la piel del moreno. Sasuke no se sentía diferente, teniendo la cabeza del rubio tan cerca de su rostro podía aspirar el olor del shampoo del rubio, un aroma que extrañaba desde que se separaron.

Gimió acalorado, cuando sintió como la traviesa lengua del blondo comenzaba a humedecer la punta de su miembro.

Las manos del azabache apretaron con fuerza los cabellos dorados del otro y lo empujo un poco hacia abajo, indicándole que quería sentirlo más.

Naruto esbozo una pequeña sonrisa y succionó un poco la rosada punta y luego se deslizo hasta tener la mitad en su boca.

Después de haberlo dejado empapado en saliva, se retiró y bajo más abajo, dispuesto a quitarle por completo la ropa interior.