Por un partido

Capítulo 32: Confesiones

Advertencia: Contiene exceso de romanticismo por parte de cierto alfa.

Dos meses después...

Siempre he pensado que todo sucede por una razón sin embargo soy de esas personas que cuestionan al destino.

No sé qué hice para merecer ser la compañera de Noah pero lo haría mil veces más si eso me garantiza que lo tendré a mi lado el resto de mis días.

Los días cada vez parecen más largos y más duraderos cuando estoy a su lado.

Jane me advirtió que sería difícil permanecer lejos de Noah aunque fuese por unas cuantas horas y tenía razón pero quedarme con los jaguares me reconfortaba.

Mike no volvió a ser el mismo conmigo no digo que se alejó porque no fue así.

Seguimos siendo mejores amigos a pesar de las protestas de Noah. Vemos películas juntos, salimos, cocinamos e incluso ha llegado un momento en el cual puedo decir que se llevan "bien". Jack es Jack, él no puede cambiar mucho aunque quiera. Sigue dejando su alma en el campo cuando juega.

No he vuelto a hablar con Angie y prefiero no hacerlo. Megan por fin conoció a Noah. 

Sí, fue un encuentro épico. Ahora son buenos amigos.

Kacey ya se marchó a la universidad. Afortunadamente para mi tranquilidad, Noah contacto con uno de sus amigos de Italia y le pidió que le echará un ojo de vez en cuando.

Mi padre finalmente conoció a Noah en un almuerzo familiar que organizo Melissa. Al principio fue un poco incómodo pero después de un rato lograron congeniar ambas familias.

Mi mamá es... bueno sigue siendo tan preparada como siempre. Digamos que la semana pasada "apareció" una caja de preservativos entre mi ropa limpia. Ella dice no saber cómo llego allí.

Y así llegue a este momento... 

Hoy era el partido. Y por el partido me refiero a que Jaguares y Lobos se enfrentarían nuevamente en el campo pero esta vez era un amistoso organizado para el público.

Realmente no deseaba ir pero gracias a la influencia de mi gran grupo de amigas me hallaba en las estradas con un banderín de los lobos en la mano derecha y uno de los jaguares en la izquierda.

Sólo podía rezar para que no hubiesen peleas o más problemas.

-¿Estas lista?- pregunto Megan sentándose a mi lado.

Asentí dándole una sonrisa nerviosa.

A mi lado se hallaban Lisa, Susan, Jane, Hadya y Megan. Como dije antes, un gran grupo de amigas.

Una bocina sonó anunciando el comienzo del partido. Me encontré esperando que la banda comenzara a tocar pero jamás empezó. Los jugadores no salían de los vestuarios.

Durante unos minutos todo el mundo pareció nervioso esperando en silencio que comenzarán a salir.

Me levanté dispuesta a bajar al campo y ver que sucedía cuando un jugador de cabello rubio salió al campo.

Con un suspiro volví a sentarme en mi puesto.

Observe como una chica con uniforme de porrista corrió a su encuentro con lo que parecía ser un micrófono en sus manos.

Ambos se detuvieron en el medio del campo. La chica le entrego el micrófono a Noah para volver corriendo a su puesto.

-¿Cómo está el hermoso público?- Ánimo con una sonrisa.

Las gradas comenzaron a gritar respondiendo a la pregunta dicha por el capitán de los lobos.

-Al parecer muy bien.- Río.-Ustedes se preguntarán el por qué no ha empezado el partido. ¿No?