Silbidos y aplausos rompiendo la pequeña burbuja que se había creado a nuestro alrededor, apenada terminé con el beso.
Les obsequie una mirada asesina a los gemelos y a Susan que aún se encontraban aplaudiendo.
Noah coloco su mano en la parte baja de mi espalda haciendo que una pequeña corriente eléctrica me recorriera la columna.
Con una sonrisa en su rostro nos acercamos a los chicos, movía su mano de arriba a abajo y de abajo hacia arriba. Todo mi cuerpo se encontraba enfocado en el pequeño calor que expulsaba aquel simple contacto..
-Creo que no nos han presentado, hermosa.- Hablo uno de los gemelos, vestía una camiseta azul con pantalones negros.- Soy Rick, el primo de Noah.- Agarro mi mano y se la llevo a los labios mientras que hacia una leve inclinación. - Estaré dispuesto a remplazarlo cuando te aburras de él.
-Muy gracioso. - Noah soltó una risa falsa.- Te quedo bueno el chiste, idiota.
-No es un chiste, lo digo en serio. - Rick me dio un guiño y volvió a besar mi mano.- Prometo ser mucho más divertido.
-Lo pensaré. - le seguí el juego. El chico de ojos azules bufó y tomó la mano que había besado Rick alejándola con rapidez del gemelo. Aparentaba estar enojado.
Espero que sepa que estoy jugando.
- Y yo soy Bastian.- dijo el otro gemelo que a diferencia de su hermano llevaba una camiseta verde.- Llámame cuando Noah deje de funcionar.
- Estúpidos.- Gruñó y acercó más su cuerpo al mío de forma posesiva.- Busquen sus propias mujeres, que ya Aimi tiene dueño.
- Yo no tengo dueño. - replique.
- Ya oíste a la chica, ella no tiene dueño y está completamente disponible.- manifestó Rick.
-Acércate a ella y te mato.- respondió de forma severa ante la provocación de su primo. Una expresión agresiva se adueñó de sus facciones.
- Tranquilo, primo.-Bastian habló con voz tranquila. Solo los podía diferenciar a los hermanos por los colores de sus camisas, el de azul era Rick y el de verde era Bastian. - Estamos jugando.
Detrás de ellos, la pareja desconocida se acercó.
La mujer compartía muchos rasgos con los gemelos como el cabello castaño y los ojos verdes.
Sin embargo, el parecido entre los gemelos y el hombre también era muy notable, con rasgos fuertes y la altura que les había heredado a sus hijos, cabello rubio con ojos de un color azul claro que parecían más violeta podría ser considerado muy guapo para su edad.
La mujer me tendió una delicada mano que tome por educación pero me vi siendo jalada por esa delicada mano para terminar siendo abrazada. Sonreía al percatarme de que era más baja que yo, por lo que había visto todos eran altos en esta familia.
Se separó de mí aun con mi mano entre las suyas.
-Mi nombre es Britany pero Noah y Susan siempre me han llamado tía Bri. -Sus ojos verdes parecieron iluminarse ante algún recuerdo. -Me puedes llamar así. - asentí levemente, aunque un poco confundida. -Soy la madre de aquellos dos revoltosos. - Miro a los gemelos quienes se encontraban discutiendo por algo que habían visto en el teléfono. Lo supuse porque lo tenían en la mano y no dejaban de zarandearlo. - Este es mi esposo Robert.- Soltó mi mano y abrazo al hombre que se hallaba a su espalda. Tenía una expresión bastante seria pero al mirar a su esposa sus rasgos se suavizaron.
-Bri.- Gritó una voz femenina a mi espalda, Melinda, la madre de Noah.
La "tía Bri" se fue con su esposo al lugar donde se encontraban sentados los padres de Noah. Aun no conocía el nombre de su padre.
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Por un partido
WerewolfAimi intenta hacer feliz a todos sus amigos pero nada lograba hacerla feliz a ella. Pensaba que su vida siempre sería así. Ella es la típica chica en la que buscarías apoyo. Su vida simple se convierte en un huracán de humor, vergüenzas y sobre tod...