El beso era todo lo que un beso debería de ser. Exigente, profundo y hambriento.
Rompió el contacto solo para mordisquearme el labio inferior.
-Noah.- jadee.
Él se alejó para observarme con una sonrisa en esos hermosos labios.
Es humano. Es de nuevo Noah.
Le devolví la sonrisa sin poder evitarlo.
Una alarma me recordó que tenía algo pendiente.
Sin previo aviso choque mi mano contra su mejilla con fuerza. Abrió los ojos y me observo incrédulo.
-Agradece que te diera solo una cachetada por mentirme.- dije con ira.
-Aimi.-comenzó a decir pero lo interrumpí.
-¿Que ibas a decir? Aimi es que tenía miedo. No, no, es solo que no sabía cómo decirte.- Lo enfrente.- ¿Sabes qué? Estoy harta, es injusto que tú me hayas visto la cara de estúpida. ¿Quién te crees...- la frase murió junto a la ira cuando la toalla que se encontraba en sus caderas cayó al suelo.
Me mirada siguió la dirección del pequeño camino de vellos que se dirigían a su entrepierna y los que rodeaban su polla.
Ahogue un gemido y me gire para darle la espalda. La imagen de Noah desnudo en medio de mi habitación me perseguiría eternamente.
-Colócate la toalla.- tartamudeé.
-Si lo hago seguirás con tu discurso. - Unos brazos se enrollaron alrededor de mi cintura.- Así estas más calladita.- Un beso húmedo en mi cuello.
-Noah.- Advertí pero mi voz salió temblorosa.
Pego su pecho a mi espalda, frotando su erección contra mi culo. Después de eso supe que no podría hablar mientras estuviera tan cerca de mí.
Trague saliva una, dos y hasta tres veces seguidas mientras él se dedicaba a frotarse contra mí y besar mi cuello.
-Creíste que no me vengaría. Me vestiste de princesa, me dijiste que tenía la menstruación. Me hiciste llorar y coqueteaste con un chico delante de mi.- su aliento acaricio mi oreja haciendo que se me erizara la piel de la nuca.
-Yo no...- interrumpió antes de que me pudiera defender.
- Cumpliré mi amenaza.- su mano se dirigió a mi vientre.
- Aimi.-Escuche el grito de mi padre detrás de la puerta. - ¿Te encuentras bien? - la manija de la puerta se movió pero la puerta no se abrió.
El pecho de Noah se hallaba rígido contra mi espalda.
- Sí. Es solo que tuve que ir al baño. - la mentira me salió pésima y las palabras atropelladas.
- Muy bien. - pareció inseguro.-Vuelve a dormir, mañana tienes clases.- Unos minutos después se escucharon pasos por los pasillos.
Respire hondo. Por poco y me atrapan.
- Eso estuvo cerca. - susurró.
- Demasiado.- me separe de él.
-Ahí viene de nuevo.- no supe a qué se refería hasta que escuche los pasos en el pasillo.
-A tu madre se le olvidó decirte que Kacey llega dentro de dos días. Va a pasar una semana con nosotros.- No pude evitar sonreír al escuchar el nombre de mi prima. Otra vez se oyeron los pasos alejándose.
Dentro de dos días Kacey estaría aquí. Tengo tantas cosas que contarle. Hace tanto tiempo que no hablo con ella, quizás un mes.
Sin darme cuenta había comenzado a caminar de un lugar a otro. Dios, Kacey vendría.
ESTÁS LEYENDO
Por un partido
WerewolfAimi intenta hacer feliz a todos sus amigos pero nada lograba hacerla feliz a ella. Pensaba que su vida siempre sería así. Ella es la típica chica en la que buscarías apoyo. Su vida simple se convierte en un huracán de humor, vergüenzas y sobre tod...