Un repentino accidente de avión, pondrá en suspenso la vida de dos chicos, Harry y Louis, los cuales apenas se conocían de vista. Ambos tienen pareja pero esa traumática situación les hará replantearse muchas cosas, dándoles la oportunidad de conoce...
Louis estaba dormido en las cuevas junto a algunos más, cuando de repente se sobresaltó pues se escucharon unos gritos procedentes del exterior.
...—¿Qué pasa?, ¿Qué pasa?— se preguntaron.
Enseguida vieron entrar al copiloto junto con otro de los hombres.
—¡Un barco!, ¡un barco!
Rápidamente todos se levantaron y comenzaron a gritar entre risas y abrazos.
—¡Estamos salvados!
—¡Siii...!
—¡Bieeeen, por fin regresamos a casa!
El castaño estaba en shock y mientras sentía que lo abrazaban en medio del jolgorio, su mente comenzó a procesar todo lo que había ocurrido y ocurriría.
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Finalmente todos salieron corriendo hacia la playa donde ya la gran hoguera estaba encendida y los demás gritaban y agitaban los brazos hacia el barco.
Harry era el único que no lo hacía, este solo caminaba de un lado a otro pensativo, hasta que vio al ojiazul y entonces se detuvo y lo miró con duda.
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La cara del castaño era todo un poema pues en ella tampoco había sonrisas ni felicidad, tampoco lágrimas de ledicia, sino que más bien reflejaba miedo y tristeza.
Ambos se acercaron y se abrazaron sin decir nada pues estaban muertos de angustia ya que al parecer debían despertar ya de ese bonito sueño.
—¿Qué pasará ahora Hazza?
El más alto se encogió de hombros.
—Supongo que debemos afrontarlo, yo estoy dispuesto a todo pero ¿Que hay de ti?—habló este sin saber muy bien como interpretar el semblante del castaño.
—Y-Yo...y-yo...
—¿Me quieres no es así?
El ojiazul asintió no muy convencido.
—Si pero...
—Pe-Pero está Stan, tu padre...es nuestra vida real.
El rizado entonces soltó un resoplido de molestia.
—Esta es nuestra realidad ahora, creí que lo tenías claro Boo.
El castaño negó entre lágrimas.
—Lo siento mucho per...
—Ya..ya—lo cortó Harry enfadado—…seguirás con él y actuarás como si esto nunca ocurrió ¿verdad?
—No lo sé...además esta Kendall y tu padre.
—¡Se lo diré!, ¡Yo estoy dispuesto a todo por estar contigo pero veo que tú no!, ¡Buena suerte, Louis!
Estr se giró y echó a correr hacia el interior de la selva y aunque el castaño iba a seguirlo desistió finalmente.
—Lo siento mucho.
(...)
La noticia de que habían encontrado a los supervivientes del vuelo fue muy bien recibida por la aerolínea, la cual rápidamente puso sobre aviso a los angustiados familiares, lo cuales habían estado dudosos de volver a ver a estos con vida.
Todos se abrazaron felices pues su angustiosa espera había terminado por fin y pronto tendrían a sus seres queridos junto a ellos de nuevo.
....—Oh Dios, por fin volverá tu precioso novio y se acabará esta pesadilla amigo—Habló Niall suspirando aliviado mirando a su amigo y a los demás.
—Hermano, Tommo está bien y regresará con nosotros—habló entonces Liam abrazando a este.
—Es genial cuñado—añadió Zayn palmeandole la espalda.
—Si, si lo es...al fin tendré a mi hermoso novio conmigo.
A escasos centímetros de ellos, la madre del castaño y el padre del ojiverde sentados juntos como lo habían estado haciendo en los días anteriores, se miraron.
—¿Lo has escuchado?, nuestros hijos regresarán—habló el empresario entusiasmado abrazando con fuerza a esta.
—Si...si...oh Dios mío, es maravilloso—habló Jay sonriendo entre lágrimas.
Ambos se miraron sintiendo esa gran conexión, la cual se había forjado a causa de muchos días y horas juntos, hablando y compartiendo cosas y momentos de apoyo, que sin duda los habían unido.
—Jay, y-yo...
—Lo sé Des, yo también lo siento.
La mujer sonrió y entonces acercó sus labios a los de este, el cual la recibió con mucho gusto y entonces profundizó el beso mientras se abrazaban con más fuerza.
El amor había nacido entre ellos y la alegría de volver a ver a sus hijos, había sido el detonante de por fin dar el paso y confesarse.
Tras separarse, la mujer se derrumbó y se echó a llorar.
—Oh Dios gracias, gracias por devolverme a mi hijo, tengo tanto perdón que pedirle.
El empresario la abrazó de nuevo.
—Y lo harás, al igual que yo lo haré con mi querido hijo...jamás volveré a dejar que se aleje de mí.
—Tengo miedo, mucho miedo—Habló nuevamente la mujer muy angustiada.
—Tranquila, todo saldrá bien, ya lo verás...yo estoy contigo.
