Percabeth....ya no quiero pelear

Era sospechoso

-Y bien? - Reyna exigía respuestas y por las caras del resto de los romanos, todos estaban más que dispuestos a iniciar otra pelea.

-Y bien qué? No tenemos que darles ningún tipo de explicación, Reyna. Al igual que ustedes nosotros tenemos derecho a reunirnos cuando queramos- Annabeth estaba consciente de que no necesitábamos otra pelea con los romanos, técnicamente seguían siendo nuestros invitados, pero al igual que todos estaba cansada de los reclamos y la actitud de Reyna.

-No olvides que tenemos asuntos en común y acordamos discutirlos juntos, ustedes están rompiendo ese acuerdo al reunirse y hablar sin nosotros como si...

-Y como estas tan segura de lo que estábamos hablando? - Preguntó Clarisse entornando los ojos y aferrando su lanza nueva.

-Acaso nos espiabas? - Sabíamos que eso era imposible, tendrían que haber entrado a la casa para poder escucharnos. Pero aun así era sospechoso.

-Por supuesto que no! ¿De qué más podrían estar hablando sin nosotros? -

-Creo que ha quedado claro que no es asunto suyo, o ¿Ustedes van a decirnos lo que hablan cuando no estamos presentes? - preguntó Annabeth parándose frente a Reyna. Las posturas de todos eran tensas, también yo quería sacar mi espada del bolsillo, pero no podíamos permitirnos otra pelea interna justo antes del siguiente ataque.

-Basta ya, tu misma lo dijiste Reyna, tenemos asuntos que tratar juntos- Annabeth apretó mi mano para agradecerme por intervenir.

-Percy tiene razón, vamos al comedor y hablemos, tenemos mucho que planear-. Todos caminamos hacia el comedor, nadie levantaba completamente su arma, pero nos mirábamos con sospecha, de un lado al otro, romanos contra griegos como si los últimos meses de cooperación no hubieran pasado.

...

-Muy bien tenemos armas que funcionarán contra los kuros, los que las llevarán ya fueron elegidos y para los demás su prioridad es protegernos y tratar de evitar que los kuros salgan del agua-. Todos asentíamos al plan de Annabeth y Malcolm.

-Leo- dijo Malcolm señalando en el mapa la ubicación de las catapultas en las cabañas- Debes mantener el ritmo de los disparos y...

- ¿Esto es absurdo, porque no nos dan esas armas a nosotros? - lo interrumpió Reyna poniéndose de pie- Después de todo nosotros somos mejores en batalla-.

Estoy harto.

-Porque las armas que tenemos solo funcionan con la sangre del dios que las trajo, si no eres hija de Ares no va a funcionar la lanza de Clarisse contigo Reyna. ¿Acaso no pusiste atención a las explicaciones? -. Dije exasperado con la actitud de los romanos.

-No seas ignorante- agregó Clarisse.

La mirada que Reyna nos lanzó estaba llena de furia, pero no dijo nada más y se sentó de nuevo.

-Y no eres mejor que yo en batalla- Los ojos de ambas casi lanzaban chispas y por las expresiones que vi, todos queríamos ver quien de las dos ganaría en un duelo.

-Sigamos- Annabeth quería terminar con la reunión cuanto antes- Si la situación nos supera volveremos a hacer lo que hicimos con los rayos- Miró directamente a Jason.

-No! ¿Estás loca? ¡No volveré a hacerlo! -

-Será nuestro último recurso, Jason... yo...

-Estás de acuerdo con esto? - Respondió él mirándome- Casi la mato-.

No, no estaba de acuerdo en que la electrocutara de nuevo, pero no podía decirlo frente a todos y causar más peleas.

-Solo como último recurso- dije apretando los puños con fuerza.