quindici ✔︎

4.5K 538 9
                                    


SeokJin llegó, a su lado habían guardias y vió a su padre correr junto a ellos. El rey en ese entonces gruñó al ver a su omega tan débil en el piso. Sin ninguna duda, el rey levantó a su omega, la cargó y empezó a correr. Ambos hermanos siguieron a su padre, preocupados por su madre.

Los hermanos vieron su padre entrar a su habitación y junto a él, un señor extraño con ropas blancas. A ambos hermanos se les había negado el acceso a la habitación, por lo que TaeHyung empezó a llorar. SeokJin al notar eso, abrazó a su hermano menor tratando de calmarlo.

Ambos hermanos se pusieron alertas cuando vieron a su padre salir de la habitación con un rostro triste, eso alarmó a los hermanos. Mientras el pequeño de ocho años estaba llorando, SeokJin aún lo seguía abrazando.

- Papá, ¿Qué le pasa a mamá? - preguntó el pequeño de cabellos negros.

- No es nada, vas a ver que en menos de lo que esperes, estará jugando contigo de nuevo. - su padre trataba de tranquilizarlo.

Pero la sonrisa que hizo en aquel momento el hombre, era falsa, pero el pequeño niño no lo notó gracias a su inocencia. En cambio, quien sí había notado la falsedad en esas palabras, fue SeokJin.

[...]

El grito del rubio alertó a los guardias y también a JiMin. Un montón de guardias corrieron a donde se había oído el grito del omega. El pelirrosa llegó un poco después que los guardias, pero se sorprendió al ver a su primo tirado en el suelo, en brazos de Yoongi.

- ¡¡HYUNG!! -el rubio gritó tratando de despertarlo y todos fueron conscientes de como el alfa abría los ojos, más no decía nada- ¡Jimin hyung, llama a un doctor! -gritó el rubio al sentir la frente caliente del alfa.

El rubio sintió un guardia se acercarse a él y a TaeHyung, y por puro instinto gruñó, sorprendiéndose a sí mismo. Aquél guardia se quitó su casco y Min reconoció al hombre como Wooyoung, sabiendo que era alguien de confianza, aquel alfa cargó al rey y fué hacia la habitación que le pertenecía al rey y ahora al rubio.

Yoongi lloraba a mares, no sabía lo que le sucedía a TaeHyung y eso lo angustiaba. El rubio vió a Jimin entrar y detrás de él un viejo alfa con vestimenta blanca, reconociéndolo como el doctor. Aquél alfa comenzó a checar al rey de una manera lenta, impacientando al rubio.

- Parece que tiene una fiebre demasiado fuerte. Puede ser por estrés o alguna otra cosa, pero no sé que podría ocasionar eso. -suspiró el doctor - A menos que... ¿Es usted el omega del rey?

- S-Sí. - dijo Yoongi aún entre sollozos.

- ¿Está usted marcado? -el alfa preguntó y el rubio negó- Ese es el problema. Si ustedes son pareja predestinada y el rey aún no ha podido marcarlo como suyo, eso altera a su lobo haciendo que enferme y si usted no es marcado prontamente, ambos caerán enfermos.

Aquellas palabras habían sorprendido al rubio. Yoongi no era tonto, sentía la manera en la que su lobo se inquietaba cuando TaeHyung no estaba cerca y como estaba feliz cuando el alfa le prestaba atención pero el rubio simplemente no quería llegar a esa conclusión.

El rubio lloró con más fuerza, no sabía que hacer, todos sus pensamientos estaban en blanco. Jimin había decidido dejar solo a Yoongi. El rubio no se dió cuenta que el doctor y Park se habían ido de aquella habitación hacía rato. Yoongi se acercó a la cama y se acostó, pegándose casi por completo al alfa enfermo.

[...]

TaeHyung despertó y luego de un momento en el que aclaró bien su vista, se ubicó en su habitación, gracias a una vela encendida se dió cuenta que ya era de noche, y también por la ventana de podía ver el cielo oscuro de la noche.

- Jimin, ¿Qué paso? -el alfa preguntó con confusión cuando vió a su primo entrar a la habitación.

- Te desmayaste en el jardín. Estábamos tan preocupados.- el pelirrosa se acercó a la cama.

- ¿Y Yoongi, dónde está?

TaeHyung vió a Park posar su mirada a un lado suyo y es cuando por fin se dió cuenta que el rubio estaba pegado a él, TaeHyung también notó que los ojos del omega estaban hinchados, confundiéndolo.

- Yoonie estaba muy asustado, es quién te encontró. -habló Jimin al ver la confusión en su primo- Los guardias y yo corrimos ya que Yoon gritó muy fuerte cuando te vió. Cuando los vimos, me dí cuenta que Yoongi estaba llorando. -el omega recordó cómo el rubio lloraba.

- ¿Él lloró? -preguntó con sorpresa el rey.

- Sí, no se despegó ni un segundo de tu lado. De hecho, le gruñó a Woo cuando quizo acercarse a tí. -rió Jimin al recordar el pequeño y casi inofensivo gruñido del rubio.

- ¿Y qué pasó conmigo? ¿Por qué me desmayé?- preguntó queriendo olvidar el sonrojo que se instaló en su rostro al oír a su primo, pero al ver que el rostro de este se tornó serio, se preocupó- ¿Qué es? ¿Es algo malo?

- Y-Yo... Creo que es mejor que te lo explique Yoongi. -dijo el pelirrosa para después salir de la habitacióN.

El alfa volteó a ver al rubio, que seguía profundamente dormido. El alfa sonrió al pensar que el omega se había preocupado por él, pero esa sonrisa se desvaneció al pensar en que es lo que le pasaba y porque Jimin no podía decirle.

[...]

Yoongi despertó y segundos después se percató que estaba durmiendo pegado al rey, demasiado pegado, pues su rostro, se encontraba en el pecho del alfa. Con vergüenza, trató de alejarse del alfa pero un agarre en su cintura no se lo permitió dándose cuenta que el brazo del pelinegro lo rodeaba.

Luego de un rato el rubio por fin se pudo zafar del agarre y cuando se paró de la cama, se fue a vestir con una camisa negra y unos pantalones del mismo color. El omega bajó hacia el comedor, tenía hambre y debía comer, pues no había comido ni cenado el día anterior.

Cuándo el omega terminó de comer un pedazo de pan que agarró de la cocina, regresó a la habitación, y cuando llegó, lo primero que vió fue a TaeHyung sentado en el borde de la cama.

𝙈𝙔 𝙆𝙄𝙉𝙂 ➸ 𝘛𝘢𝘦𝘎𝘪ᵃᵈᵃᵖDonde viven las historias. Descúbrelo ahora