only angel 𖦹 jj maybank.

01. welcome back, angel.

capítulo uno:
bienvenida, ángel.
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LOS THORNTON HABÍAN ESTADO FUERA DE OUTER BANKS POR UN MES. La familia kook había estado en Australia, debido a unos asuntos laborales de William Thornton. Aquella idea no le había agradado a los mellizos, no les gustaba estar fuera del banco de islas. Tuvieron que dejar la comodidad de Kildare para irse a vivir un mes en un lugar donde habían arañas por doquier pero también tiernos koalas y canguros bebés. Los mellizos se emocionaron al escuchar que irían nuevamente a Outer Banks, lugar en donde crecieron y ya tenían su vida.

Los Cameron y Thornton estaban teniendo un desayuno de bienvenida. Aquellas familias eran muy unidas. El desayuno era afuera, frente al hermoso patio de los Cameron. Había desde uvas verdes y rojas, hasta panecillos embarrados en mantequilla y mermelada de fresa. Aquellas bocas se abastecían mientras platicaban animadamente sobre el mes que los Thornton estuvieron en Australia, mientras los Cameron escuchaban atentamente.

Pero habían dos personas faltantes en la mesa.

Los dos integrantes eran Leila Thornton y Rafe Cameron. Ambos se encontraban acomodando sus ropas después de un encuentro a escondidas en el baño de arriba.

Habían estado un mes sin verse. Ninguno se amaban, y eso estaba claro, su relación fue creada por sus padres, y seguían juntos por eso mismo. También por los pequeños encuentros en sus autos y baños.

Ambos bajaron nuevamente hasta el patio, donde estaban sus familias. El olor a waffles y jugo de naranja inundaron las fosas nasales de Leila, y su estómago rugió mientras se le antojaba algo más que aquel chico rubio que estaba a su lado. Se sentó en medio de su hermano mellizo y al lado de Rafe, mientras tomaba un plato y comenzaba a llenarlo de comida.

—Se demoraron bastante —susurró Topper a su lado, disimulando con una sonrisa.

—Te aseguro, no querrás saber los detalles, hermanito —contestó Leila igualmente con esa sonrisa falsa en su rostro, mientras servía jugo en su vaso de cristal. Topper suspiró mientras volvía a su plato y a su novia.

Pasaron los minutos y a Leila le dolían sus mejillas de tanto tener dibujada una sonrisa de niña buena. Su cabello rubio estaba amarrado en una coleta desordenada, y sobre su frente caían mechones delicados y enroscados en pequeños rizos. Al lado de su hermano estaba Sarah Cameron, la cual depositaba cariñosamente una uva en la boca de su hermano, haciendo que la rubia perdiera el apetito instantáneamente. Leila era algo fan del romance, solo el de las películas, pero le daba asco ver como su hermano se comportaba tan cariñoso y amoroso cuando llevaba meses sin darle un abrazo; le costaba creer que aquel Topper era real.

Leila revolvía el revoltillo con su tenedor mientras miraba a todos a su alrededor. Su padre era fornido, de cabello canoso, un poco parecido a Ward Cameron, su madre tenía unos rizos rubios muy bonitos y sedosos, y sus ojos eran tan azules como el cielo.