Caramel Frappe {Larry Stylinson} (EDITANDO lentamente)

Capítulo 24.1 - Please don't leave me!

Realmente estoy harto de toda esta mentira con Nick. Ya no lo amo, eso quedó en el pasado. Y ni siquiera lo quiero como un amigo, ¿Saben? Después de toda esta mierda espero sinceramente que se largue de mi vida de una puta vez. Estoy demasiado enojado. ¿Quién diablos se piensa que es? ¿Mi dueño? ¡Ha estado tratándome como su maldita puta! Sinceramente ya no lo soporto. Hemos discutido millones de veces y su única defensa fue decir que me acusaría con su padre y él despediría a mi madre. ¡¿Quién mierda despediría a alguien sólo porque su hijo no ama al suyo?! ¡¿Pero qué diablos le ha pasado al mundo?! Estoy harto de esta mierda. No suelo ser una persona que se saca de sus casillas fácilmente pero esto me ha superado. A la mierda con Nick. Hoy hablaré con mi madre sobre todo esto de la supuesta separación con Louis porque no lo amo, sobre el estúpido engaño de Nick y sobre la mierda de plan que tiene para mantenerme consigo.

Me importa nada lo que él tenga que decirme, ya no puedo soportar ni siquiera el sonido de su estúpida voz.

-Harry, amor ¿A dónde vas? –preguntó desde el sillón.

-A ver a mi madre. –dije seco.

-¿Voy contigo? –preguntó sonriendo.

-No, quiero pasar tiempo a solas con ella. Hace rato que no lo hago, la extraño. –le sonreí falsamente y él me creyó.

-Oh, está bien. Llámame antes de volver, pasaré por ti e iremos a cenar. –me volvió a sonreír mientras se acercaba a besarme. Esto me da asco.

-Bien, adiós. Nos vemos luego. –dije y salí de su casa.

El camino desde su casa hasta la mía era de casi media hora, media hora en la que podría pensar bien qué diablos le diré a mi madre. Sé que ella se enfadará mucho conmigo por lo que le he hecho a Louis y que probablemente hasta renuncie para que pida disculpas a Lou... toda esta situación me frustra demasiado. Por un lado tengo que aguantar vivir con el idiota de Nick, y por el otro lado tengo miedo de que Louis haga algo estúpido otra vez... y por mi culpa. Por ser tan cobarde de no haber dejado las cosas en claro desde el principio, ¿Qué me costaba arriesgarme? Nada, no me costaba nada, joder.

Llegué a casa y suspiré. Realmente tengo miedo de lo que diga mi madre...  entré luego de unos segundos y miré si estaba y, efectivamente, ella estaba allí. Mierda, Harry, viniste a hablar, no a temblar.

-¿M-Mamá? –dije temeroso.

-¿Harry? Hola, cariño. Pensé que no te vería hoy. –sonrió.

-Oh... uhm... tenemos que hablar. –miré al suelo.

-No estás embarazado, ¿verdad? –bromeó.

-No, mamá, no estoy embarazado. –reí. –Pero es serio... ¿Recuerdas que me separé de Louis?

-Sí, una de tus peores decisiones. ¿Qué con eso?

-Verás... no fue porque quisiera dejarlo realmente. –seguía con la mirada fija en el piso, no quiero ver su cara de decepción.

-¿Qué? Explícate, no te entiendo. –dijo confundida.

-Nick me obligó a hacerlo... su padre es tu jefe y me dijo que te despedirían si no hacía lo que él decía. –ella rió.

-¿Qué? Así que lo que dijo era cierto. –volvió a reír. –Harry, su padre me había dicho la estupidez que Nick te dijo, y también me dejó muy en claro que no me despediría sólo porque a su hijo se le cruzaran los cables. –mis ojos se aguaron.  

-¿Qué? ¿Por qué no me lo dijiste?

-Me lo ha dicho hoy, cariño. Así que ahora ve, patéale el trasero a Nick y ve por nuestro Boo. –dijo ella sonriendo.

-Está bien, gracias. –la abracé.

Salí de casa completamente feliz, pensé que ella se enojaría, no que sabría todo. Ahora mismo iré a terminar toda esa mierda con Nick, y espero que Louis este bien. A todo esto mi teléfono sonó, era el número de Niall. Él mismo me lo había pedido en la fiesta, no sé para qué.

-¿Hola?

-Por favor, ven rápido. –decía desesperado.

-Pero ahora estoy yendo hacia otro lado, ¿Qué pasa? –dije confundido, sonaba muy mal.

-¡Me importa una mierda lo que estés haciendo! –gritó. -¡Por favor, ven! –sollozó y se escuchaban unos sonidos extraños. -¡Louis! ¡Louis abre, por favor!

-¿Louis? ¿Qué pasó con él? ¿Niall? ¡Horan responde! –la llamada se cortó.

¿Louis? ¿Qué le pasa? Ya iba a mitad de camino, retrocedí todas esas calles que parecían no terminar jamás hasta la casa de Horan, sabía la dirección gracias a que Louis una vez me había pedido que lo acompañara hasta allí. ¿Qué sucede con Louis? Por favor, que no sea lo que pienso. Por favor.

Llegué hasta su casa casi sin aire, pero eso no me interesa. Golpeé la puerta y toqué timbre repetidas veces, un correteo se escuchó desde dentro y la puerta se abrió de golpe. Niall estaba llorando y desarreglado.

-¡Es Louis! ¡Creo que está intentando suicidarse otra vez! Lo siento, no se me ocurrió otra persona para llamar, sé que seguramente estuvieras con Nick y te cause problemas, pero tú eres el idiota culpable de esto y no tenía a nadie más... -decía demasiado rápido.

-Cálmate y dime dónde está él. –asintió.

Tomó mi mano y corrimos hasta lo que supongo que sería su baño, él golpeaba y nadie respondía. A la mierda el golpeteo inútil. Pateé la puerta una vez, nada. Otra y otra, al cuarto la puerta se abrió y allí estaba. Mi Boo con cortes profundos en sus brazos, recostado sobre la bañera y demasiado pálido. Apenas si pestañaba. Corrí hacia él.

-¡Louis! –grité –No, no, no, bebé, no me hagas esto. –comencé a llorar, no, esto no puede estar pasando.

-D-déjame ir... -dijo y apenas se pudo escuchar.

-No me dejes. –sus ojos se cerraron. –Por favor, Lou... ¡No me dejes!