Caramel Frappe {Larry Stylinson} (EDITANDO lentamente)

Capítulo 26 - Lou? Please Stay.

Se hizo un silencio incómodo por unos segundos y el doctor volvió a hablar.

-Verán, él perdió bastante sangre y aún no ha despertado... –mierda, mierda, mierda, no. Por favor no. –Puede despertar hoy como del mismo modo puede despertar dentro de unos días. Pero hasta este momento no corre peligro, lo cual no quiere decir que esté fuera del mismo. No sé si me explico. –habló tranquilamente. Yo volví a respirar, ni siquiera me había dado cuenta de que estaba conteniendo el aire. ¿Lou no está en peligro?

-Entendemos. –sonrió mi madre.

-Bien. Como se darán cuenta, no podrá salir de aquí hasta dentro de unas dos semanas al menos. Por chequeos y esas cosas. –dijo.

-Está bien, ¿Cuándo podremos verlo? –hablé apresurado.

-Repito, el joven aún no se ha despertado, deberían dejar que descanse por unas horas... pero, supongo que tú eres el que estaba gritando desde afuera de la sala ¿verdad?

-Sí. –dije apenado.

-¿Son pareja?

-Algo así... -rió.

-Pueden pasar ahora, no hay problema. Habitación 208. –me sonrió y se movió para que podamos pasar.

-¡Gracias! –dije feliz. Bueno, al menos lo más feliz que pude.

Día 1 a 4

Todos entramos y allí estaba él, pálido, con gasas algo manchadas con sangre en sus brazos, y en esa maldita habitación, blanca, aburrida y por donde todos sabíamos que varias vidas se habían perdido, muchas personas tuvieron que ver a un ser querido partir, donde es posible que más de uno se habría quedado aquí todo el tiempo junto a esa persona hasta que se recuperar, y ese sería mi caso. Por más que Niall no esté de acuerdo, que diga "si despierta y lo primero que ve es a ti, se abrirá los puntos.", me quedaré de todos modos. Él no hará eso, ¿verdad?

-Harry, insisto, deberías ir a casa por hoy. –habló un Niall ya realmente harto de intentar correrme de la habitación.

-No lo haré, lo he dejado bastante tiempo en la hora del almuerzo. –dije acercándome más a la camilla y Niall suspiró.

-En serio, hombre, ¿Cuántas veces tengo que repetirte que en cuanto despierte y te vea a ti se sacará de sus casillas? –tocó su pelo, frustrado. –Otra vez. –añadió.

-¡Que no lo hará! Por el amor de Dios, Niall. Deja de ser tan negativo conmigo al respecto.

-¿Negativo? ¡¿Negativo?! ¿Cómo diablos quiere que no sea negativo? Mi mejor amigo está en una puta camilla, en un maldito hospital, cabe aclarar que es por  TU culpa, no sabemos cuándo despertará y si es que lo hará, pero claro, YO NO PUEDO SER NEGATIVO. –dijo completamente alterado.

-Lo siento... -hablé mirando al piso.

-Lo que sea. Iré por algo de beber y luego te marchas por hoy. –dijo cerrando la puerta tras suyo.

Esperé a que sus pasos ya no se oyeran por el pasillo y me tranquilicé.

-¿Lou? ¿Puedes siquiera oírme? –dije triste. –No puedo verte así, Lou... lleno de cables y con esas gasas en tus muñecas. ¿Por qué lo hiciste? –mi voz comenzaba a quebrarse. –Me odiarás después de esto ¿verdad? –reí sin ganas. –No te culpo, yo también lo haría. –una lágrima cayó por mi mejilla.

La puerta se abrió y Niall hizo que me marchara, sin importarle mi estado.

-Hasta mañana, Lou. –susurré antes de irme.