Caramel Frappe {Larry Stylinson} (EDITANDO lentamente)

Capítulo O6 - Something Stupid.

Me desperté un poco más tarde que de costumbre, a juzgar por la luz que entraba por la ventana… una ventana que no era la mía, y que yo sepa no me puedo abrazar así a mi mismo. Oh por dios. ¡Estoy en la casa de Harry! Lo olvidé por completo. Oh dios. Me giré un poco y lo vi, aún dormido con su brazo sobre mi, sus rulos estaban hechos un desastre, tenía una mueca rara en la cara y, a decir verdad, babea demasiado. Reí ante la imagen.  Mi pequeña risa debe haberlo despertado, ya que abrió un poco los ojos y sonrió.

– Hola, Lou. – dijo con su voz ronca por el sueño.

– Hola, Harry. – le sonreí. - ¿Crees que podrías dejarme ir? Enserio debo ir al baño. Desde hace horas. – reí. Mirando cómo él aún me tenía en su agarre.

– Oh, lo siento mucho. – dijo soltándome y dándose la vuelta. A decir verdad sentí un vacío cuando se alejó. –Louis, él es tu amigo. – Pensé.

Cuando salí del baño me encontré una vista para nada desagradable. Harry recién levantado y sólo usando un pantalón holgado.

– ¿Disfrutando la vista, Louis? – preguntó divertido.

– Mmm… no eres mi tipo. – respondí guiñando un ojo.

– Seguramente, soy demasiado sexy como para ser tu tipo. – ambos reímos.

–  Anda, ve al baño a lavarte. Intento de chico sexy. – añadí entre risas.

– Soy sexy. – dijo antes de meterse en el baño.

–Oh, claro que lo eres. – susurré muy despacio por miedo a que él escuchara.

Me cambié para así parecer más una persona y no un vagabundo y me dirigí hacia la cocina. No, no tenía el permiso de Harry y mucho menos el de Anne, pero al ver la hora decidí que era tiempo de tomar un desayuno. Hot Cakes, mis preferidos, aunque al no saber los gustos de Anne o Harry también preparé un poco de tocino con huevos revueltos. En tan solo 15 minutos el desayuno estaba servido. Escuché unos pasos por las escaleras y supuse que era Harry, pero me equivoqué.

–Parece que además de ser apuesto y simpático sabes cocinar, Louis. – dijo su madre dulcemente observando la mesa.

–Sí… lo siento si fue una molestia. – dije. – Por cierto, no sabía qué les gusta desayunar así que preparé estas dos cosas… –dije bajando un poco la cabeza avergonzado.

Esta vez oí otros pasos y sabía, por descarte, que era Harry. Apenas puso un pie en el último escalón habló como si sólo estuviese su madre allí.

–Mamá, no te deberías haber molestado en preparar el desayuno, yo podría haberlo he… – no pudo terminar que se quedó mirándonos como si fuésemos marcianos o algo por el estilo. Reí.

–Harry, cariño, parece que alguien se nos ha adelantado. – dijo su madre bastante divertida por la expresión que tenía su hijo en este momento. Su rostro estaba pasando por toda las gamas desde los rosados hasta los rojos. – y debo de admitir que lo ha hecho muy bien. ¿Por qué no te sientas y pruebas? – añadió y ella y yo nos miramos a punto de soltar una carcajada.

–E-Está bi-bien. No te hubieras molestado, Lou. – logró decir Harry, a lo cual Anne y yo no aguantamos más la risa.

– Tranquilo, Harry. No es molestia, después de todo dejaste que me quedara aquí en la noche. – sonreí metiendo un bocado de HotCakes en mi boca. Él sólo me observaba.