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HueningKai había notado una conducta diferente a la del primer día que estuvo en ese lugar, el licenciado Choi no salía de su consultorio para llamar a su paciente cuando este ya tenía al menos una consulta previa, lo único que hacía era decir un fuerte "Siguiente por favor" y ese día no fue la excepción. Una vez recibidas estas palabras por sus oídos, se levantó dejando a su amigo en la sala de espera para ingresar al ya conocido consultorio.

-Creí que no volvería a verte - las palabras del pelinegro fueron directas, un tanto cortantes pero a la vez transmitía un escalofrío en el cuerpo del menor - Quiero que te vuelvas a recostar en el sillón, intentaremos otra vez navegar por tus recuerdos.

La voz, su postura y la firmeza con que pronunciaba cada una de sus palabras eran suficientes para que Kai entendiera que quizá, y solo quizá, si debía haber renunciado a continuar con esas sesiones. 

Realizó lo que le fue indicado mientras que Choi tomaba su tableta electrónica y se acercaba sin tener ningún tipo de contacto visual con el castaño. Tomó una de las sillas que estaban frente a su amplio escritorio y la acercó al sillón donde descansaba el menor con la mirada completamente atenta a cada uno de sus movimientos, tomó asiento y finalmente vio a Huening. 

-¿Cómo te fue esta semana? - de nuevo ese tono, Kamal decidió mirar a otro lado para poder responder correctamente.

-Pues estuvo relajada, no tuve mucha tarea y pude descansar más - SooBin asintió, cuando estaba por hablar el menor se lo impidió - Y bueno, digamos que ocurrió algo un tanto relevante - ahora miraba sus manos mientras sus dedos jugaban entre ellos.

-¿Qué es eso relevante?

-Felix hyung me ayudó con unos problemas de matemáticas, una cosa llegó a la otra y me terminó besando - cuando pronunció esa última palabra no pudo evitar sonreír notoriamente logrando que el mayor pudiera notar que eso lo hacía feliz.

-¿Desde cuando se lleva matemáticas en la carrera de Bellas Artes? Que yo recuerde no está incluida en el programa de estudio - aquello lo dijo con el fin de no hablar directo sobre lo que pasó.

-Es una asignatura extracurricular, cada semestre debemos tomar una para completar los créditos de titulación - explicó el castaño mirando a Choi - Lo que no entiendo es el porque decidí que esa sería una buena opción.

El de cabellos oscuros se levantó para dejar su tableta en el escritorio y regresó a la silla inclinándose ligeramente hacia Kamal.   

-Dime, ¿te gusto besar a Felix? - utilizó un tono de voz más dulce pero con un ligero toque de seriedad.

-Creo que si, no era lo que esperaba pero fue el primero - respondió sincero sin romper el contacto visual - puede que después se sienta mejor.

-¿Eso crees? - Choi se acercó aún más provocando que su aliento chocara con el contrario - Veamos quien es mejor ahora.

Sus labios se unieron con brusquedad, al menor lo tomó por sorpresa pero no tardó en responder apoyando sus manos en los hombros del pelinegro entre queriendo alejarlo e intentando que hubiera más contacto.

HueningKai se levantó para sentarse en las piernas del contrario aprovechando que la silla no tiene reposabrazos pudiendo estar más cómodo. El mayor sujetó al castaño de la cintura con su mano derecha y con la otra recorrió las espalda del menor con lentitud sin hacer mucho contacto, solo un suave roce con la punta de sus dedos.

Después de unos segundos se separaron por falta de aire, la respiración de Huening era irregular y mantenía sus ojos cerrados procesando las nuevas sensaciones vividas en el momento.

-¿A quién prefieres ahora, HueningKai? - el nombrado no respondió, prefirió volver a besar al pelinegro.

El nuevo contacto fue más intenso que el anterior, las manos de Choi esta vez se desplazaron por debajo de la playera del menor sin vergüenza. Se había dado cuenta de la inexperiencia de Huening por la forma torpe en que intentaba seguirle el paso lo que lo hacía aún más tierno de lo que era pero la intensidad le impedía ser delicado.

Con un movimiento un tanto brusco cambió sus posiciones depositando el delicado cuerpo del menor sobre el sillón pudiendo así quedar sobre de él sosteniendo su propio peso en sus brazos que tenía a los costados del castaño. Kamal, por su parte, comenzó a juguetear con los botones de la camisa del mayor, no tenía la más mínima idea de lo que estaba haciendo pero sabía que lo necesita, ansiaba por hacerlo.

Choi necesitaba más, dejó los labios de Huening para comenzar un camino de besos pasando por su barbilla, recorriendo su cuello y llegando a su clavícula derecha donde no pudo evitar el hacer una marca tenue logrando que el menor jadeara. Quería devorar toda la piel de Kai que fuera posible pero su plan se arruinó al momento en que alguien tocó a su puerta.

-Maldita sea - susurró, procedió a levantarse, acomodó su ropa y abrió un poco la puerta para ver de quien se trataba.

-Señor Choi, lamento interrumpir pero hay una joven afuera y quiere saber si le puede dar una consulta el domingo - informó la recepcionista con la mirada agachada.

-Dile que mis días de trabajo son de lunes a viernes y no hago excepciones con nadie - respondió con frialdad - Ahora deja de interrumpir - dicho eso, cerró la puerta y regresó a donde el menor ya estaba sentado acomodando su ropa - Aun no termino, hermoso.

-Señor Choi, no creo que esto sea correcto - la voz del castaño salió en un susurro.

-El humano está diseñado para hacer lo incorrecto, fuimos creados para cometer errores y aprender de ellos, sin embargo esto no lo considero para nada un error.

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𝐅𝐀𝐋𝐎𝐅𝐎𝐁𝐈𝐀 | 𝐒𝐎𝐎𝐊𝐀𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora